𝚌𝚎𝚕𝚘𝚜 | hq!!

» Sugawara Kōshi.

La práctica había terminado, así que esperabas a Suga mientras platicabas animadamente con Daichi.

-Entonces le dije "soy amigo del barbón" y salió corriendo.—Rió.

Reíste a carcajadas.

-Te pasaste.—Golpeaste levemente su hombro con una sonrisa.

-¿Tú crees?—Rodeó tu cuello con su brazo.

-Sí, ¡usar a Asahi de escudo es muy cruel!—Volviste a reír.

-Si lo dices así, suena mucho más divertido. ¡Así que tu también eres culpable!—Revolvió tu cabello.

En ese momento Suga salió de los vestidores, encontrándose con una escena para nada linda.

-______, vámonos.—Te tomó de la muñeca y te jaló. -Adiós, Daichi.

Suga te llevaba casi arrastrando.

-Kōshi, ¡e-espera!—Forcejeaste.

Paró en seco.

-Oye, ¿qué pasa?—Le miraste preocupada.

Pero él solo siguió caminando sin siquiera mirarte y tú solo caminaste a su lado sin decir nada más.

Sin darte cuenta, habían llegado a su casa.

-Pasa.—Dijo con voz grave.

Obedeciste y entraste.
Te quitaste los zapatos y susurraste un "con permiso".

-No hay nadi--.—Te interrumpió plantando un brusco beso.

Te pegó a la pared mientras se besaban.

-K-Kōshi...—Suspiraste.

-¿Sabes?—Besó tu cuello. -No me gusta verte hablando con otros chicos.

Después de decir eso te tomó de las piernas, haciéndote enredarlas en su cintura.

-Te haré olvidar a todos.—Susurró seductoramente en tu oído antes de lamer el lóbulo de ésta.

Fin.