Carta Nro 1

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 Venia de regreso de un viaje junto a él, íbamos en barco de regreso a la ciudad cuando empece a escribir la primera carta.. Pero antes de eso, contare porqué decidí empezar escribir todo eso para él, sin que él se enterara. 

Pase unos días con el en la Isla de Margarita, Nueva Esparta (Venezuela),  compartí mi primer viaje con una persona totalmente lejana a mi familia, mi primera experiencia en avión fue solamente para ir a verlo, y conocer al resto de sus familiares. Sí, primera vez que me montaba en un avión sola.  Realmente la emoción que tenía por ir a verlo no era normal, aunque también estaba aterrada a montarme en un avión, y deseando ir en una ventana para ver las nubes flotar vivir una experiencia ESPECTACULAR!. Y así fue, me toco sentarme del lado de una ventana, realmente iba totalmente maravillada viendo las nubes, como parecía mar con grandes bolas de algodón flotando por encima, en ese momento tan lindo al estar viendo por la ventana, ver un paisaje espectacular, me sentí tan agradecida con el mundo, porque por fin, me termine de sentir viva, agradecida por tener a alguien como él, a mi lado. La verdad, es que fue indescriptible lo que sentí sentada allí, viendo por la ventana. Ya casi, llegábamos a la isla y lo supe porque lo vi desde las alturas, y sin duda alguna ya iba a aterrizar, los nervios fueron peor, que al principio pero vaya que estaba jodidamente feliz. Aunque mi rostro no lo expresara en su totalidad. 

Al aterrizar salgo del avión , y respiro el aire de isla, y seguí caminando viendo para todos lados, en busca de mi equipaje, al aterrizar lo llamo, ya él estaba cerca del aeropuerto, que me esperaba ahí... Empieza la correa del equipaje a correr, mi maleta nada que aparecía, realmente estaba un poco obstinada.  Por fin, llega.

Al tomar la maleta salgo, y lo veo afuera parado, con la sonrisa que siempre tuvo al verme, esa alegría en particular que solía ver en su rostro, y joder como me sentí tan feliz de volverlo a ver.

Salí corriendo a abrazarlo muy fuerte y darle un beso, de ahí  cogimos camino a la playa, estaba su familia esperándome. Realmente fue hermoso la manera en la cual me recibieron... 

Ese viernes 6 de enero del 2017 fue un día lleno de alegrías y rabia vaya que sí. 

 ¿Rabias?, sí rabia, mucha la verdad, ya él tenia tiempo extraño y ella no entendía perfectamente porqué ni se molestaba en preguntar cada segundo, que ocurría con él, simplemente decidió ignorarlo, luego entendió cual era el motivo de su rareza. Y en resumen, la verdad fue que el mientras en su viaje de vacaciones de navidad. Tuvo una aventura con alguien afuera, por decirlo así, se dice que fue solo mas que un beso. Pero vaya que a ella, eso la hirió, ¿Como demonios se entero?, por qué paso lo siguiente

- Me puedes prestar tu celular para subir un Snapchat- Dice ella 

- Claro, ten - Dice él, entregando el celular. 

Y al abrir el Snapchat fue directo a cerrar el de él pero no cerraba la cuenta, y de la nada aparecen unas 4 fotos mas o menos, donde había una chica besándolo, y con lengua en medio, las fotos fueron tomadas por la chica de las imágenes.  Él no lucia completamente sobrio la verdad..  

Ella al ver eso, se lleno de muchísima rabia, no sabia exactamente que hacer, así que bloqueo el celular por un rato, y lo volvió a agarrar, nunca tuvo el valor de abrir las fotos, ya con verlas así pequeñas fueron mas que suficientes, por fin pudo cerrar el Snapchat, intento simular que se tomaría la foto pero la verdad es que no pudo, de hecho hasta la clave de su cuenta la olvido al ver eso. 

Él, se da cuenta que pasa algo, ella se para para ir al baño y es ahí donde ella intenta no decir nada, tenia planeado de hecho esperarse a la noche y soltarlo pero la verdad es que no aguanto y respondió las preguntas de él

-¿Que tienes?, ¿Que pasa?- Pregunto él angustiado 

-Nada, nada- Respondió ella con un nudo en la garganta

-Que pasa dime!- Exclamo él 

-Tu sabrás!, vi unas fotos en tu teléfono con una chica y una lengua u algo así- Dijo ella ya con lagrimas cayendo a sus mejillas 


Y ahí el se torno totalmente mas pálido de lo es, no tenia marcha atrás o que ocultar, ella le pidió ir al carro a hablar, porque no se quedaría parada al frente de mucha gente viendo lo que estaba sucediendo allí, el intento tomar su mano pero ella no quería que la tocara, la verdad sintió asco hacia él esas horas que pasaron, asco, impotencia.  Él no se excuso, solo dijo que esa noche había bebido demasiado, todos en aquella reunión habían tomado demasiado, y el realmente no estaba dentro de sus cinco sentidos. Pero igual paso, igual lo hizo!. 

Ella la verdad no tenia mucho que decir, no podía ni verlo, solo lloraba pero de rabia, y de dolor obviamente. Porque mientras él estaba de viaje, ella estaba esperando volver a verlo, y confiando jodidamente en él. La verdad es que él se sentía como un completo imbécil, y él no era para ella de esos típicos imbéciles que hacían eso, no es de esos. Pero ese día lo puso en duda, realmente se decepciono, la confianza se daño desde ese entonces. Ella pensó en terminar la relación, el igual porque en un momento dijo lo siguiente 

-Bueno, por favor vamos a disfrutar los días que tenemos aquí- Dijo él en voz baja.

Ella realmente se detuvo a pensar, mucho porque realmente solo quería regresar a Caracas, su celular estaba muerto, no podía llamar a su mamá, en ese rato solo se detuvo a pensar si el hablaba ella no escucha mas nada, solo sus pensamientos y en que demonios debía hacer. Porque joder, lo quiere demasiado, y si termina la relación en ese momento seria darle el gusto a la gente que realmente querría que eso pasara. Y no estaría luchando por lo que ella quería en ese momento, él. 

Él pedía una oportunidad, una manera de arreglar todo. Incluso pidió que le impusieran condiciones y por Dios haha, ya es un hombre sabe lo que esta bien en una relación y lo que no, y en la vida, no habría porque imponer condiciones, algo realmente absurdo. 

Arreglan las cosas, ella totalmente desbastada, intenta sonreír y olvidar lo que paso. Y así fue, regresan a la playa, almuerzan, se bañaron un rato en la playa. Estaban en El Yaque por cierto. 

Realmente pasaron una tarde hermosa, llena de aventuras porque hasta en un colchón de agua que tira a todos en el medio del mar, se montaron,  compartieron un atardecer agarrados de la mano caminando por la arena. Todo hermoso, y así fueron el resto de los días, hermosos, mágicos la verdad.. Llenos de risas, locuras y un buen sexo de reconciliación el mismo viernes en la noche. 

Cartas para élWhere stories live. Discover now