Pesadilla

13.3K 701 23
                                    

- "¡Katia, tienes que curarla!" - levanté la voz.

- "Alex... No puedo... es demasiado tarde, ya casi no queda vida en ella... lo siento." - dijo triste Katia y bajó la mirada.

- "¡¿Qué estás diciendo?! Vamos haz algo... Te lo suplico..." - tragué saliva.

- "Alex... dejala... no es culpa suya. ¿No lo sientes? Está al borde de la muerte..." - la defendió Scott. Me giré hacia Juliet y la miré a los ojos.

- "Juls... Por favor... bebe..." supliqué desesperado.

- "Ssshhh..." - dijo y vi como negaba con la cabeza.

- "Soy sólo un experimento..." - sonrió débilmente.

- "Pero... yo... te quiero..." - dije y vi como de sus ojos desaparecia toda su vida. De la otra habitación vino Dante con Max. Dante se quedó paralizado y por sus ojos se deslizaron lágrimas.

- "Dante, lo siento..." - me disculpe. - "Lo siento mucho..." - tragué saliva y bajé la mirada hacia Juliet.

- "¿Cómo has podido? ¡Eres un jodido!" - se enfadó Dante y me cogió del cuello por detrás.

- "¡Dante, sueltale!" - dijo Scott y le apartó de mi.

- "¡¿Dejaste que se muriese?! ¡Eres un idiota! ¡Confiaba en ti! ¡Confiaba en ti!" - gritó Dante intentando salir de los brazos de Scott.

- "Chicos, mirad..." - los detuvo Katia y señaló hacia el cuerpo de Juliet. En los pies de empezaron a aparecer cristales de color violeta oscuro.

"¿Qué es eso?" pregunto Max dirigiéndose a Katia.

- "Esta desvaneciendose..." - respondió Katia confudida y sorprendida a la vez. Todo el cuerpo empezó a llenarse de esos cristales que al final se rompieron en pedazos y desaparecieron. Caí de rodillas al suelo y empece a llorar, Dante perdió el sentido, lo cual sorprendió a Scott y a Max.

Me desperté, eran las tres de la madrugada, intentaba tomar el aire, pero era casi imposible. Di unos tosidos y luego vi que sólo fue pesadilla, estaba en mi habitación. Decidí ir a la cocina a beber algo frío, para refrescarme. Cuando bajé vi que en el sofá estaba dormido Dante. Cogí una manta del pequeño armario que había en el salón y se la pase por encima. Luego apagué la televisión que estaba puesta y me dirigí hacia la cocina.

- "¿Qué haces despierto?" - preguntó la voz de Dante detrás de mi.

- "Tuve una pesadilla... ¿Y tú?" - Pregunté y me giré hacia él.

- "Pesadilla... ¿Otra vez con ella? No consigo dormir." - respondió y me miró a los ojos.

- "Si... otra vez con ella..." - bajé la mirada triste, no habían pasado ni dos días, sin verla y me parecia una eternidad.

- "Deberías descansar, tienes ojeras." - me aconsejo Dante y sonrió, para animarme.

- "Tú también tienes ojeras..." - suspiré.

- "Voy a intentar dormir, hazlo mismo." - me dijo y se fue hacia su habitación, la cual estaba en la planta de arriba. Di un suspiro y me saqué del bolsillo el móvil, fui a la parte dónde tenía guardadas las fotos y miré una de Juliet. Estaba preciosa, sonriendo, era una de las pocas que me había guardado de ella. A su lado estaba Ann, Natasha y Matt. Supuse que era del pasado Halloween, estaba disfrazada de pirata. Sonreí, pero en seguida sentí como en los ojos me aparecian lágrimas.

Parpadee unas cuantas veces, para así evitar que saliesen. Volví a meter el móvil en el bolsillo y me dirigí hacia el jardín. Nada mas salir, respiré el aire libre y luego recordé como hace mucho por primera vez había hablado a solas con ella en el.

- "En todas partes... te recuerdo..." - suspiré triste.

- "Siento no haberte salvado... Lo siento..." - hablaba conmigo mismo y bajé la mirada. Volví a tragar saliva y intenté calmarme.

Después de estar un rato en el jardín, decidí volver a entrar en casa.

- "Estás muy pálido..." - observó Scott, el cual estaba preparandose el desayuno.

- "Deberías comer algo..." - añadió y me ofreció una tostada.

- "Gracias, pero no tengo hambre..." - respondí y quería volver a mi habitación.

- "Espera, Alex."

- "¿Qué pasa?" - pregunté cansado.

- "Mira, se que te ha dolido lo que ha pasado... Nos ha dolido a todos, pero deberías cuidarte. Es decir, no dejar de hacerlo. Ella no quisiera que estuvieses así." - dijo Scott después de unos momentos de silencio.

- "Deja de meterla a ella... Lo dices como si no te importase. Y si esperas que lo voy a superar en un chasquido de dedos, estás equivocado..." - gruñí enfadado. No soportaba que me hablase como si fuese un niño pequeño.

- "Me voy a mi habitación." - esperé un momento para ver si el me decía algo y después regresé a mi habitación.

Just My Soul (Libro  2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora