– Cállate, no me importa en absoluto lo que salga de tu boca – cuando terminó de subir las escaleras entré en pánico, así que corrí lo más rápido que pude y me encerré en mi habitación cerrando la puerta con pestillo – Skyler, si no quieres que te vaya peor abre la puerta.

– ¡No la abriré! ¡Me harás daño! – exclamé alejándome de la puerta por lo que pudiera pasar – ¡No tienes derecho a hablarme así, y mucho menos a tratarme así! ¡Entiéndelo Dylan no puedes hacer lo que haces!

– ¡Entiende tu que aquí el que manda soy yo! ¡Soy el mayor y además soy el hombre! ¡Abre la puerta de una maldita vez, Skyler, abre la puerta! – gritó golpeando está como si no hubiera un mañana. Yo, por mi parte comencé a llorar como una loca, tenía demasiado miedo de lo que pudiera hacerme.

Mi llanto paró en el momento que Dylan le dio una fuerte patada a la puerta haciéndole un agujero. Después continuó dándole patadas. Iba a entrar. Cuando asomo su cabeza rompí en llanto otra vez y comencé a gritar. Algo estúpido, ya que nadie podría escucharme. Dylan metió su mano por uno de los huecos que había hecho y luego, consiguió abrir la puerta.

– No debiste hacer eso – comentó acercándose poco a poco a mi. Yo no podía dejar de llorar, y ahora me arrepiento muchísimo de que las cámaras de mi habitación no funcionen – Mira, Skyler, yo no sé que mierda le has dicho a los demás para que se pusieran todos de tu parte, incluso Dallas. No sé cómo diablos lo has hecho. Y no tengo ni idea de si dijiste algo de lo que yo te dije aquel día pero a mí me da que si. Has abierto tu maldita boca y por eso te están protegiendo de mi, pero escúchame bien – se acercó aún más a mi y susurró – Ahora estamos solos.

– No, Dylan, no me hagas daño por favor – pedí entrecortada a causa del llanto – Si te detienes ahora las cosas entre nosotros pueden cambiar, por favor, detente – él ignoro mis palabras y mi llanto e intentó, a la fuerza, quitarme la camiseta que llevaba puesta – ¡Dylan no lo hagas! ¡Para Dylan! ¡No lo hagas por favor! ¡Para! – grité desesperada.

Dylan me pegó un fuerte tortazo en el rostro haciendo que dejara de gritar –: ¡Cállate, zorra, cállate! – gritó mientras continuaba quitándome toda la ropa – ¿¡Qué es esta mierda!? – gritó cuando consiguió ver las marcas de los cortes que estaban en mis muñecas – ¡Qué sepas que no me das pena, perra! Voy a hacerlo igual.

Cuando Dylan logró dejarme completamente desnuda, me dio un par de fuertes golpes y después, me tiró a la cama.

Y ahí comenzó a hacer lo suyo. Me estaba violando.

DALLAS POV.

Jake, Jackson y yo nos encargábamos de ir a buscar a los dos nuevos integrantes. Harry y Harper irían a buscar el almuerzo de hoy. Connor, Emily y Dylan irían al supermercado. Ya estábamos en la estación de autobuses esperando a que Caleb y su novia llegaran. Ni siquiera Jake sabe el nombre de esa chica.

– ¿Caleb tiene algo para poder diferenciarles? – preguntó de pronto Jackson soltando una carcajada – Como son gemelos y yo torpe, pues no sé si voy a poder saber quién es quién...

Entonces Jake levantó su mano y nos enseñó un tatuaje que tenía sobre esta. Era la J de Jake –: Mi hermano tiene tatuada en la misma mano que yo la C de Caleb. Eso es lo único que nos diferencia, en lo demás somos exactamente igual, incluso tenemos el mismo tono de voz – se encogió de hombros.

– ¿También se parece a ti en la forma de ser? – pregunté divertido – Es que no creo poder aguantar a otro como tú – bromeé para luego comenzar a reírnos juntos.

– Han llegado ya – comentó Jake mirando su teléfono móvil – No les veo... – Cuando Jake dijo esas palabras otro chico exactamente igual a el salto sobre Jake y ambos cayeron al suelo – ¡Caleb! – exclamó Jake.

¿Podré con tanta sobreprotección?Where stories live. Discover now