Semana SawaHaru 2017

El flequillo de Haruichi

Segundo/Tercer año AU | Secretos

Desde el momento en que Haruichi se recortó el flequillo por primera vez, Sawamura supo que las cosas no podían ir bien.

―No es traición, Eijun.

― ¡Cómo no va a serlo!

Aunque la verdad es que Sawamura adora la independencia de Harucchi y no quisiera que empezara a consultarlo todo con él. Es solo que pudo contarle antes de hacerlo y no después. Solo eso.

―Eijun, cada día estás más paranoico― con una sonrisa de la que seguro su hermano se enorgullecería.

― ¿Desde cuándo se supone que estoy paranoico? ― El ceño fruncido y las manos vueltas puño. Haruichi se traga la risa pero no la sonrisa, y responde con toda la tranquilidad del mundo porque no sirve de nada ponerse al tú por tú con Eijun y no piensa hacerlo. No por ahora, al menos, anota mentalmente.

―Desde el partido que tuvimos contra Yakushi, tal vez― precavido, por si acaso sirve para no alterarlo más.

No funciona.

― ¡Es culpa de Súpernada! ¡Tú lo viste! Su bola rápida es demasiado buena y...

―Y no dejarás que te supere, Eijun. Lo sabemos― parando en seco a Sawamura. Haruichi sonríe por la reacción que le saca y se acerca un paso para tomarle la muñeca izquierda, acariciándolo con el pulgar en los nudillos. ―Te estás esforzando demasiado. ―No dejes que te abrume.

Hace no más de doce horas que Haruichi se recortó el flequillo y Sawamura ya se enamoró de poder verlo a los ojos y poder ser analizado.

No lo piensa realmente cuando ya le ha besado de lleno. Es cosa de nada, pero puede sentir la vibración de su risa contra los labios y se abraza a él, haciendo que el beso se corte y recargándole la frente en su hombro.

―No tienes que agradecer nada, Eijun― sin que Sawamura siquiera abriera la boca aún. Sonríe, emocionado y con la stamina corriendo por su cuerpo a toda velocidad. Harucchi tiene ese efecto en él, ese llenarlo de emoción, ese leerle tan fácilmente. Haruichi sabe que estaba por agradecerle y por disculparse de su paranoia, pero no quiere que ninguna de esas palabras salga de la boca de Eijun, por lo que se abraza a su cuello y se deja llevar por el balanceo de su novio. Sawamura puede ser demasiado intenso en ocasiones, más no hay problema para él.

― ¿Cómo lo haces?

― ¿Cómo hago qué?

Pero Sawamura se traga la pregunta vergonzosa y en lugar de eso se separa lo suficiente como para que no rompan su abrazo. Desde su posición pueden verse a los ojos. Eijun sonríe como si hubiese ganado el premio al novato del año, Haruichi siente su corazón golpeándole el pecho y el rostro caliente.

Esta vez, es él quien lo besa apenas en un roce.

Cuando se separan, respirándose, Eijun aprieta los párpados y le habla al oído. ―Olvida lo que dije, creo que me gusta mucho tu nuevo corte. Te queda ― y eso que Haruichi no ve venir hasta que llega contundente, le hace hervir el rostro y le enamora―. Me gustan tus ojos.