Cumpliendo Promesas (EN EDICIÓN)

Capítulo Veintiuno

—Primero el chico del hospital, su padre y ahora Theo.

—Trent, largate de aquí ahora —Theo se ve furioso y yo creo no poder controlarlo.

—¿O si no, qué?

—No querrás averiguarlo.

Trent lo mira por unos segundos hasta que niega con la cabeza y comienza a caminar. Se detiene en las puertas del ascensor.

—Ella te traerá problemas hermanito.

En el momento en el que mi ex novio se marcha, Theo se vuelve hacia mí—. ¿Quieres que te vaya a dejar?

—Sí —lo miro dulcemente.

Llegamos a mi casa la cual se ve completamente a oscuras. Bajo del auto de Theo y él imita mi acción. Una vez que estamos bajo mi ventana él se acerca a besarme. Pasamos unos minutos así hasta que nos separamos—. Debo irme —susurro.

—¿Te veo mañana?

—Buscame a la salida del trabajo —murmuro contra sus labios.

—De acuerdo. Ahora sube.

Subo por el árbol que se encuentra al lado de mi ventana y salto dentro de mi habitación. Aterrizaje perfecto.

Christian

Estoy revisando unos papeles cuando escucho el timbre de la casa. Bajo las escaleras con cansancio y llego a la puerta. Al abrirla mi corazón se acelera.

Mila está frente a mí con su cabello mucho más largo y ondulado, mucho más delgada y con gesto cansando—. Hola, Christian —me da una sonrisa de boca cerrada.

—Mila.

—¿Puedo pasar? —señala el interior de mi sala.

—Depende. ¿Planeas matar a mi hijo? —enarco una ceja.

—Christian, —ella suspira— sé que estuve mal en intentar matar a Vera, pero te juro que ya la venganza no existe en mí. Ella no merecía todo ese daño.

—Sin embargo lo causaste. Largo de mi casa antes de que llame a la policía.

—¡Tengo derecho a ver a mi hijo! —chilla con lagrimas en los ojos.

—¡No me importa! —grito—. Tuviste tu maldito momento y no lo aprovechaste. Ahora largo o te acusaré de intento de homicidio otra vez.

Ella abre los ojos con gran sorpresa. Baja los escalones de la puerta principal, no sin antes voltear.

—Yo no fui quien irrumpió en esa boda e intento matar a su hija. Voy a luchar por mi hijo, Christian. No importa el costo.

Cierro la puerta en su cara.

Leah

—Gracias por traerme Mónica —sonrío.

—No es nada —se encoje de hombros. Debo pedirle que me deje unas cuadras antes.

—Puedes dejarme aquí —señalo una cafetería.

—¿Quieres algo? —sonríe—. Podemos ir a tomar algo juntas. Tengo tiempo.

—No veo por que no.

Bajamos del automóvil entre risas y entramos al local. Estamos por pedir cuando me detengo de golpe al ver a mi tía con expresión dolida.

—Louisa —murmuro.

Mónica me pone tras ella—. ¿Se le ofrece algo? —Louisa aprieta su mandíbula.

—¿Y tú eres?

—Su madre. ¿Tú?

Louisa suelta una carcajada llena de burla—. Conocí a su madre. Tú no te acercas ni en la pose.

—Claro. Sé que Vera era una mujer maravillosa. No como usted que viene a acosar a Leah, quien al parecer no la quiere cerca.

—Leah es mi sobrina. Y tengo derecho a verla.

Los ojos de Mónica se abren con sorpresa—. ¿Sobrina? ¿eres la hermana de Vera?

—Así es. Ahora muevete que quiero ver a mi sobrina.

—Pero yo no quiero verte a ti —ladro. Louisa parece afectada por mis palabras—. No puedo ver a una cobarde como tú.

—Leah...

—¡Callate! No quiero escuchar tus estúpidas excusas. Abandonaste a mi madre en sus peores momentos y eso no tiene perdón. No sé que clase de hermana te crees tú.

—¿Hermana?

Un frío recorre mi espina dorsal al escuchar su voz.

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¡NO PUEDE SER! Enfrentamiento entre familiares. ¿Qué pasará después?

Las invito a leer la sinopsis de mi nueva novela. "Amor Criminal" Se encuentra disponible en mi perfil y creo que está increíble. Me ayudarían mucho sus votos. Pronto otro capítulo. MUCHO AMOR!!!