CAPITULO 9

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Mi mano descansaba a mi regazo, mientras escuchaba "Shape Of You de Ed Sheeran". El autobús se movia un poco lento, pero no me quejaba, mientras más tarde llegará... Mejor.

Había pasado una semana desde que había visto a Álex, me comentó sobre que tenía que ir de vacaciones a la casa de su hermana, que quedaba a las afueras del país.

Me dijo que hoy día regresaba y la verdad es que no tenía planeado venir, pero mi madre me dijo que trajera un pequeño presente como bienvenida de nuevo, ¡Por Dios solo fue una semana!

El bus paro y entonces me di cuenta de que estaba donde quería, baje con el regalo en manos y camine por la carretera para llegar a su casa. Algunos pensaran que es la típica carretera de tierra y que Álex vive rodeado de viviendas de material noble, pero la verdad es que la carretera tiene pista, está rodeada por pinos, y la casa de Álex no está tan alejada de la civilización.

Una vez llegué a su puerta toque el timbre.

En pocos segundos el me abrió.

Estaba sin camiseta y tenía el cabello revuelto. Todo parecía indicar que había dormido.

- Oh, hola Nat ¿Que haces aquí? ¿Eso es para mi? -pregunto el señalando el regalo que traía entre mis manos. - Bueno, Hmmm ¿Que tal si vamos a tomar un café? -entonces supe que me estaba ocultando algo, definitivamente lo estaba haciendo.

¡Salio sin camiseta a la calle!

- ¿Que escondes Alexander? -pregunte yo fulminando lo con la mirada.

- Yo... Nada -y la sonrisa que apareció e sus labios fue lo que remato todo, estaba actuando demasiado extraño.

Ignorando que me siguiera hablando, lo rodee y entre en su casa. Al instante escuché una voz femenina.

- ¡Alex! ¡Alex! ¡Se acabó el chocolate! -todo fue tan rápido en esos momentos,... Por lo menos para mi.

Por el salón apareció una chica con solo una camisa puesta, supuse que era la camisa de Álex. Tenía gran parte del cuello cubierto de chocolate y su cabello también estaba revuelto.

Trate de irme cuando me vio pero unos fuerte brazos me atraparon ni bien me giré.

Alexander.

- Yo... ¡Voy matarte! ¡¿Pensabas que podías jugar con dos al mismo tiempo!? ¡Yo no soy de esas! ¡Asi seamos amigos con derecho, no puedes simplemente meterte con la primera que te abre las piernas! -exploto, totalmente furiosa, estaba segura que en estos momentos mi rostro estaba más rojo que un tomate.

- ¡Hey! ¡Cálmate Nataly! ¡Es mi hermana! -

- ¡Pero claro que es tu hermana! ¡No podría ser... Espera ¿Que?

- Es mi hermana -

- ¿Y como explicas el que estés sin camiseta y ella con chocolate y solo esa cosa? -dije refiriéndome a la ropa.

- Se quedó y no tenia una pijama le preste mi camisa, me dormí así por el calor, hoy día desperté y ella había encontrado la Nutella y ama la Nutella, trate de quitársela y empezamos a echarnos la encima... Es es tu explicación ¿Feliz? -uy.., creo que se enojo.

- Yo... Hmmm, se lo que quieres que diga Álex -dije mirándolo al ver que el me fulminaba con la mirada. - Yo... Soy tonta, me humilló a mi misma, me siento avergonzada, y soy Nataly -me voltee viendo a la chica que estaba en frente mio, de seguro tenía una sonrisa en la cara que más parecía una mueca.

- Hmmm... Hola, soy Megan -ella camino hacia donde yo estaba y me tendió la mano a lo que yo la acepte gustosa.

- Esto... Lo siento por lo de hace unos momentos pensé que era algo diferente. -el calor subió a mis mejillas te bronces supe que me había sonrojado... Ahora que falta ¿Que me haga pipí?

- No te preocupes, la mayoría piensa que Alexander y yo..... Somos novios, amigos con derecho, esposos,.... puto y puta -aunque lo de mi hermano creo que si es verdad.

- Yo no...

- Tranquila, no hablo por ti, lo digo por todas experiencias que el a tenido. No esperes que te lo cuente por que, se molestaría demasiado conmigo,.... Él tuvo su... Etapa oscura. Por eso no te ha dicho ni un te amo,... Todavía -pero, el único problema era que..., Yo no quería que me dijera te amo.

Estaba comprometida y a pesar de todo lo que hiciera mi madre me obligaría a casarme, así yo no quiera. Álex por otro lado, solo me quiere para el sexo y esos ya lo tengo muy claro.

- Yo.... Solo estoy en una situación difícil. No planeo, ni quiero enamorarme de el. -Megan me miro raro pero al final decidió optar por solo sentarse en el sillón.

Prendió la tele y me casi al segundo me dijo que iría al baño.

Álex apareció después de que ella se fue.

- Nat, yo... Quería decirte que no puede pasar esto otra vez -

- ¿A que te refieres? -pregunte haciéndome la desentendida.

- Lo que te dio hace poco ¡Ese ataque de celos! No puede volver a pasar, sabes lo que buscaba desde un inicio contigo, nunca fue amor, no puedes reclamar lo que no es tuyo, y yo no lo soy, tienes que comprenderme -

- ¡No esperes a que yo me quedé cruzada de brazos! ¡Me siento mal! ¡Y tengo sentimientos aunque no lo creas! ¡Que te vayas a las piernas de otra es casi infidelidad! -

- ¡Tu lo has dicho! ¡Casi! ¡Quedamos en ser amigos con derecho! ¡Es una relación abierta! ¡Te advertí que esa decisión sería la primera y la última! ¡No intentes retractarte por que ya es tarde! -

- ¡Yo....! ¿¡Sabes que!? ¡Puedes irte a la mierda con tu relación abierta! ¡Yo no podre... ! ¡Me estás haciendo ser alguien que no soy! -

- ¡Tu decidiste cambiar! ¡Yo solo te di la iniciativa! -no se que fue lo que me impulso a hacerlo pero, lo golpee.

En el estómago.

Una palabra.

Duro.

- No sabes cuánto te odio... -dije entre dientes.

- Eres tan.... Sexy -¿Te golpeaste la cabeza, hijo?

- Estás loco -tome mi bolso y decidí pasar por su lado para irme.

Mala decisión.

Tomo mi cintura y estrello su boca con la mía.

No pude.

Simplemente no pude apartarme.

Sus labios estaban calientes.

Tan jodidamente calientes.

Hizo que subiera mis piernas y las enrollara en su cadera.

Diablos.

Quería desaparecer.

Quería quitarlo de encima mío.

Pero no podía.

Estaba jodida.

Estaba cayendo en el amor.

Mi PadrastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora