Toujours seule.

801 92 22
                                    

Era una mañana gélida, mi nariz estaba helada y aún sentía cómo todo me daba vueltas. Recordé que aquél no era un día de trabajo, lo cual significaba que lo tenía libre. Ignoré el vacío interior, ignoré cómo algo dentro de mí se volvía a romper, pero aún así, estaba consciente. Llevé una mano a la boca y, cubriendo la misma, tosí tres veces, una tos seca y ronca que me caracterizaba, estaba atónito ante la situación, pues no recordaba casi nada. Era sumamente inaudito para mí y no volvería a suceder.

"Dazai-san..."

Murmuré débilmente al recordar aquéllas noches en las que con su mano acariciaba mi mejilla y con sutileza depositabas un fugaz beso en mis labios, los músculos se contrajeaban, dejando un cuerpo tenso, incluso las manos formaban dos puños apretados. Ese contacto sorprendía, la felicidad conjugada con el nerviosismo, aún me arrepiento de haber quedado paralizado, sin saber qué responder.

Quería que me reconozcas.

Quería que reconozcas mi fuerza.

Soy mejor que ése estúpido hombre tigre.

Y así fue, lo hizo. No fue en vano ningún esfuerzo... ¿La forma adecuada era morir al demostrártela? Quién sabe.
Se había podido sentir el repentino cambio de la brisa y los mechones moverse hacia la dirección que querían.

"Dazai-san, moriste porque eras débil."

No me lamento de haberlo lastimado de tal forma, al punto de matarlo. Tampoco el no tener misericordia, admiro la determinación que tenía mientras la sangre corría por las finas facciones de su rostro y batallaba por respirar. Sabía las consecuencias de mis actos, mas maté a un traicionero de la Mafia Portuaria y, debido a que era débil, se fue para siempre.
Ahora mismo, me encuentro yendo a la tumba para dejarle flores, qué gracioso. No tengo interés de volver a ir, ni muchos menos recordarle, igualmente no negaré que hubo momentos divertidos al estar con él.
Al fin de cuentas, Mori se terminó enterando, nunca supe detalles de lo que pensó o cómo reaccionó, me citó especialmente para decirme que valió la pena "Jugar la pieza más hambrienta", la cual se refería a mí. No mostré expresión aparente cuando lo dijo, y agregó "Eres un perro rabioso, ¿Sabes? Haha."

Así es, un perro callejero, un perro más del montón.

Sigo tratando de omitir nuevos sentimientos encontrados, aún sigo mintiéndome, son cuchillos en mi mente, ya superé la barrera del dolor, ya no siento nada. Siento tanto que ya no puedo controlarlo, sólo queda esto.

"Me volveré más fuerte."

Pensaré eso una y otra vez, no me volveré incapaz de controlarme, no lloraré, no seré débil, siempre estaré solo, la compañía es fastidiosa, encariñarse con alguien es patético.

"Aunque era una excepción, él era especial. Dazai-san, será la primera y última vez que lo diga, te amo."

✨✨✨✨✨✨

Listop. Tenía ganas de escribir algo, espero que les guste. Si comentan qué les pareció, estaré encantada de leerlos~.

✨✨✨✨✨✨

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Oct 21, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Cuchillos en mi mente.Where stories live. Discover now