Estaba sentado en la orilla de la cama, encerrado en su celda, observando las noticias en la tele que su compadre había hecho que llevaran, al parecer Juan era el cuñado del alcaide, así que el no tenia que pagar a los polis, ni trabajar haciendo falsos secuestros, en realidad estar ahí era como un descanso, un descanso para su persona, pero, para su conciencia era una tortura, el solo hecho de estar encerrado sin hacer nada le hacia pensar en las cosas que había realizado; claro que tenia a sus compañeros de celda, las actividades deportivas, la biblioteca, etc; pero esta ultima en realidad no le servía de mucho. Se salió de la escuela aproximadamente cuando tenia 9 años, él veía la situación de pobreza en la que se encontraba su familia, veía lo mucho que sufría su hermano de 4 años al no comer por días, así, que decidió irse cada mañana con su padre a la ciudad para trabajar y mientras su padre se iba a una casa a arreglar el jardín o algún otra cosa que le pidiera su patrón, el andaba por los semáforos vendiendo productos, hasta que un día un joven se acerco al el mencionando que podría ganar mas dinero si avisaba cuando un coche con ciertas características anduviera rondando por ahí, a el se le hizo una manera demasiado fácil de obtener dinero y acepto.
A los 12 años se empezó a meter mas en el ambiente, ya lo llevaban a las operaciones y por su puesto que se asustó la primera vez que vio un muerto; pero con el paso del tiempo se acostumbró y fue subiendo de nivel, empezó a secuestrar y vender droga, en fin todo lo que le mandaban a hacer. Se alejo de su familia, tenia miedo que a ellos les fuera a pasar algo por su culpa y la única comunicación que tenia con ellos era cuando les mandaba dinero. Desafortunadamente a sus 19 años en una emboscada de la marina, fue capturado y enviado al cereso con una pena de 35 años, si, saldría de allí a los 54 años si no fuera por Juan que ya había hecho un trato, con según su compadre, alguien importante, un alto mando, en realidad solo puso atención al hecho de que nada mas pasaría en el tambo por 3 años para no mover las aguas y llamar la atención de la prensa; así que realmente solo le falta 1 año para salir y por esto el sentía que le debía la vida Juan, reducir su condena a tan pocos años, pero, ese tiempo en prisión lo hiso pensar en que todavía tenia tiempo y edad para terminar sus estudios o abrir un pequeño negocio y así poder volver a ver a su hermano, pero no podía, para empezar de ese trabajo no se puede salir , bueno, solo hay una forma y el todavía no quiere eso, entonces lo único que le queda es seguir adelante con su situación y sacar provecho de los beneficios mientras Dios le de la oportunidad.
