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-Señorita Dugés entiende las acciones que se llevaron a cabo.

-Las comprendo oficial.

Los dos oficiales se levantan del cómodo sofá blanco hueso traído de Francia por mi madre hace tan solo 6 meses tal vez no los vuelva a ver el costo sofá, ni la costosa televisión o mi habitación el auto, La cocina, a Petty o más grave aún tal vez no vuelva a ver a mis padres.

Donde quedaran mis años de estudio en la preparatoria Revos, mis esfuerzos por ser sobresaliente para ser llamada por mis maestros" la joven modelo de Revos", destacada en artes, deportes, química, matemáticas, presidenta del club de debate, próxima reina del baile yo debería estar pensando en empacar mis maletas para ir a la universidad de UTAH no si regresare a mi hogar simplemente estoy congelada, petrificada pero que sucedió en tan solo un año para llegar a esto.

Para llegar al día donde soy arrestada.

-Sade Mey Dugés usted está arrestada por cómplice en atento de asesinato en contra del Señor Frank Davis tiene derecho a guardar silencio y a negarse a responder preguntas, cualquier cosa que diga puede ser usada en su contra en un tribunal judicial, tiene derecho a un abogado...-solo escucho un pitido en mis oídos no entiendo que está pasando solo volteo a ver a mis padres, mamá llora en el pecho de papá mientras él le infunde consuelo y seguridad mientras él me dirige una mirada de dolor, se mantiene apacible contrario a mi madre. Pero yo no puedo salir de mi shock nada sale de mi boca al ser girada con la vista al suelo de manera que mis manos son puestas atrás de mi espalda donde son colocadas las esposas el oficial me gira nuevamente donde puedo ver a mis padres y el pitido desaparece para poner escuchar los sollozos de mi madre en el salón de la casa.

-mamá...-intento caminar hacia ella pero el oficial no me lo permite y jala mis hombros para comenzar a caminar en dirección al portal de mi casa.

-Sade no digas nada, yo arreglare esto hija- la voz de mi padre queda atrás mientras soy sacada de mi casa esposada con mi nombre por los suelos, mi dignidad totalmente estropeada y tal vez sin mi libertad.

-Sade-llaman mi nombre y volteo a ver entre la multitud de vecinos que se agrupan a las afuera de mi hogar y lo reconozco entre la multitud su rostro se contrae de confusión y de sorpresa intenta dar unos pasos en dirección a mí y con mis labios pronuncio un "no" pero sin mi voz retrocede hasta estar lejos de la multitud; soy subida a la patrulla de manera un poco tosca donde mi cara termino en el asiento donde muchos traseros de delincuentes ya han estado me incorporo cuando la puerta ha sido cerrada y acerco mi rostro a la ventanilla para ver mi casa mientras el oficial arranca lejos de la multitud lo contemplo al tomarse su cabello negro y jalarlo con fuerza.

Sé que esto pasaría tarde o temprano sé que ocurría y sobre todo estuve consiente de las cosas que hice ya lejos de mi casa próxima a la autopista y seguramente a una reja coloco mi nuca en el respaldar del asiento de la patrulla viendo al techo aunque la postura es incomoda mi cabeza y mi corazón están confusos así que por los momentos me importa un carajo si siento dolor.

-en que carajos me metí- exhalo el aire que tengo en mi pulmones mientras poco a poco mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas pero no las dejo caer tengo miedo, la verdad tengo mucho miedo pero tengo que tener la cabeza fría y hacerme responsable por lo que hice y solamente por lo que yo hice.

las acciones cometidas por un infractor debe ser pagadas tarde o temprano porque con un simple perdón no se resuelven los crimines porque de que sirve tener leyes y policías si se pueden salvar  con un mendigo perdón esta claro que estamos en la vida real.

y Sade sabe que esto no se resolverá con un simple perdón.

MI RESPONSABILIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora