Estés enojada/o.

6K 33 2
                                    

Todos tenemos malos momentos, pasamos por tragos amargos y experiencias de todo tipo, pero cada uno de nosotros los tomamos de diferente manera. E incluso cuando somos tan distintos y nuestras reacciones también lo son, en algo si concuerdamos; siempre llegamos a sentir enojo, coraje, furia. Tal vez en diferente cantidad, pero lo sentimos.

No es como cuando tienes una reunión con tus amigos y al final te dejan plantado/da, o cuando pides permiso a tus padres para salir y no te lo dan, o cuando tus hermanitos se comen tus galletas favoritas sin previo aviso. No esa clase de enojo (aunque eso también es bastante molesto💔).

Hablo de ese sentimiento de furia, donde quieres incluso llorar de impotencia, de esa rabia que te hace apretar los dientes y tener que tragarte el coraje. Si es así como te sientes, deberías seguir leyendo...

Hay un sinfín de cosas que nos hacen o harían estar de ese modo, recuerda que todos tenemos problemas a veces muy similares, a veces muy diferentes, pero siempre los tenemos. Así que, ¿Cuál es la razón de que estés así? Hay que dejarlo salir todo, ese es el primer paso para sentirte mejor.

Primero que nada, vayamos con las personas involucradas. ¿Es de familia? ¿Son tus amigos? ¿Algún conocido? ¿Alguien jugó contigo o te engañó? ¿Te traicionaron? ¿Violaron tu confianza? ¿Es sobre la escuela? Piensa bien tu respuesta; piensa bien la razón y piensa bien tu argumento, porque a veces la rabia no nos deja ver ni pensar claro.

Cuando estamos enojados solo pensamos en dañar a la persona que se supone causa ese enojo, sólo queremos "venganza".

Pero la verdad es que de nada nos sirve eso. No encontraremos la paz, ni la satisfacción que pensamos. Y al conseguirla, el verdadero daño es para nosotros. Porque estamos siendo igual o más crueles que las personas por las que sentimos rencor.

Podemos ser diferentes, marcar un cambio, ser mejores personas. De verdad podemos. Si quieres enseñarle una lección a esa persona, déjalo, la justicia llega sola de alguna manera.

Cada guerra, cada lío, cada conflicto empieza por ello. Por venganza, por rencor, por ver quién es 'más fuerte', mejor, por ver quién se sale con la suya... pero ahora tenemos la oportunidad de cambiar las cosas. Y el cambio empieza por uno mismo.

Así que piensa siempre con la cabeza fría. ¿Qué quieres hacer? ¿Vas a solucionar de verdad el problema o simplemente vas a 'darle lo que merece' a la persona?

Sé que se difícil, sé que estás molesta/molesto. Te entiendo, lo he sentido. Sé que solo quieres ir y darle un buen golpe en la cara a esa persona. Sé que tienes mucho que decirle. Sé cuántas malas palabras estás pensando en gritarle, lo sé.

¿Y sabes que más sé? Qué tu eres diferente, y que no vas a actuar de la misma manera en que ellos actuaron contigo. Rompe esa cadena.

Si estás enojado/da respira hondo. Si quieres llorar, házlo, es lo mejor para sacar esa rabia. Si quieres gritar, golpear una almohada, patear, saca todo ese enojo, porque si lo dejas dentro de ti te aseguro que vaya envenenar tu alma.

El segundo paso es comprender todo a tu alrededor. ¿Que causó tu enojo? ¿Cómo empezó la ira? ¿Quién? ¿Por qué? ¿Cómo reaccionó esa persona? Y lo más importante... ¿Cómo reaccionaste tú y/o cómo piensas reaccionar?

Siendo sincera, comprendo si no pensaste en ese momento e hiciste algo que se salió de las manos. Pero no te preocupes, porque siempre podemos enmendar nuestros errores, todo tiene solución, excepto la muerte.

Responde todas las preguntas que hay en tu cabeza. Sé sincera con todos, y contigo misma.

Si eres una persona orgullosa, haz un esfuerzo por aceptar tus errores e intentar arreglar las cosas. Después de tiempo puedes llegar a arrepentirte si no lo haces y tal vez luego sea demasiado tarde.

Intenta hablar con los involucrados en tu enojo, comprende sus posiciones y pide que comprendan la tuya. Y logra llegar a un acuerdo con ellos. Si no se cumple, no odies a nadie... Aprende a dejar ir a quienes solo causan daño.

Y algo que nunca falla, abre tu mente y corazón a quiénes confías. Pídeles su opinión, más no te pido que obedezcas lo que digan. A veces nos hace bien escuchar lo que piensan los demás para tomar una decisión.

Y si te equivocas, no te preocupes pues a veces ganamos, a veces aprendemos, pero nunca perdemos.

Abre cuando...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora