NIKLAS I (Let me love you)

Capítulo 37: Me estoy enamorando perdidamente de ti.

—...Pero bueno, el español y el inglés son los que mejor se me van— continuó contándome.— Mis padres siempre habían sido buenos amigos de los Neumann y ya que los chicos nacieron en Venezuela, aprendí mucho más con ellos. A veces con Willi viajábamos para allá y pasábamos todo el verano hablando español.

—Pues que envidia— comenté— Yo apurada hablo alemán y el inglés se me va muy bien pero no como yo querría.

—Sabes que lo haces excelente...después del Abitur (El Bachillerato) estuve un par de meses en Australia, trabajando y aprendiendo más el inglés— dijo.

—Sí, ¿Con Gabriel no?— pregunté. Melanie me había contado un poco de aquello. Él asintió.

— ¿Te llevó a tu casa y luego salimos? — preguntó mientras recogía los platos de la mesa.

—Mi padre me mataría si me llega a ver contigo— dije sonriente.

—Te dejo unas cuantas casas antes y paso a comprar unas cosas que necesitamos y luego paso de nuevo por ti. ¿Te parece mejor así?— preguntó con suavidad mientras se acercaba a mí acariciando mi cabello y metiéndolo detrás de mi oreja. Yo asentí— Eres hermosa, Salomé— dijo mientras me plantaba un beso en los labios.

(...)

Rato después ya estaba en su carro rumbo a mi casa. Trataba de convencerlo de que me diera una pista de hacia dónde me llevaría pero no logré sacarle ningún tipo de información.

Como detective moriría de hambre.

Amaba como su cabello se movía rebelde de un lado al otro producto de la brisa que se metía por el pequeño rabillo de la ventana que había dejado abierta. Me dejó como acordado a unas cuantas casas antes de la mía.

—Pasaré por ti en una hora y media—dijo besando nuevamente mis labios.

Al entrar a la casa, no tuve que enfrentarme ni con mi padre ni con mi madre, ya que habían sido invitados a un almuerzo a las afueras de la ciudad con los colegas de papá. Lo había olvidado antes.

"Estoy en casa, espero que se estén divirtiendo un poco. Saldré en un rato con Niklas, te diré a dónde vamos a penas lo sepa; dijo que sería sorpresa. Espero que esté bien para ti, te amo mamá. Hasta luego". —Salomé

"Recuérdale mis reglas. Me alegra que hayan resuelto todo, pido que cuentes cuando regreses. Cuídate y compórtate. También te amamos". —Mamá.

Me di una ducha y estuve aproximadamente media hora en frente de mi armario intentando elegir que ponerme.

«¿Debo vestirme casual, elegante, deportiva?»

No tenía ni idea, ya que ni siquiera sabía a dónde iba.

Me decidí por un pantalón gris y una blusa manga larga de cuadros negros y blancos que me llegaba hasta un poco más arriba de las rodillas y unos sneakers Adidas grises, no iba tan deportiva pero tampoco tan casual. Al bajar, vi unos Muffins de Milka chocolate que estaban en la cocina y le di un mordisco a uno de ellos mientras tomaba un vaso de leche,no me pude resistir.

Agarré mi bolso y justo cuando me dirigía hacia la puerta escuché que alguien entraba, era Lilly.

—Uy,¿A dónde vas tan arreglada? ¿ya hiciste las pases con Niklas?— preguntó interesada.

—Sí, algo así— respondí— Te cuento los detalles cuando regrese. ¿Cómo te fue hoy en el entrenamiento?— pregunté.

Lilly había comenzado hacía unos meses a practicar Tenis y le estaba yendo de maravilla.