El Cuaderno Azul

"mamá Natalia"

Hoy te recordé, y me quedé impactada al ver que mi corazón latía con mucha fuerza. Fue en esa foto que vi,y me acordé de este mes tan doloroso que pase pero valió la pena porque gracias a eso pude conocerte más.

Sol y calor, corria sin parar ese día tratando de parar a un amigo para que no golpeé a un compañero que me había cortado la mano cuando sin querer atropelle a alguien y la tiré. La levanté,le pedí perdón y segui corriendo Hasta que un grito me detuvo.

-¡pará Luna!- esa dulce voz que conocía perfectamente se había esfumado

me empezaste a gritar retandome Mientras todos me observaban. Yo estaba conteniendo mis lágrimas para no llorar y ahí fue cuando me dijiste

-¡corres como un caballo!

Subí la mirada y no podía creer que un día me ibas a hablar así. Sentía como cada abrazo se borraba rápidamente. De pronto apareció una profesora que corrió a mi lado y sintió mi piel de gallina,se llamaba Miryam. Estaba helada, trato de llevarme a la dirección porque sabía que estaba lastimada.

-¡SOLTAME!

Le grite con mucho enojo, yo sabía que no se lo merecía pero uno se enoja con quién puede,no con quién quiere. Mis lágrimas empezaron a salir y sólo poder mirarla fijamente a los ojos para decirle te odio.

Llevé mi mano a mi cara y me sequé las lágrimas,pero mi cara quedó un poco manchada con la sangre de mi mano que todavía estaba lastimada. Te miré con  odio como nunca pensé que lo iba a hacer y salí corriendo a mí grado sin parar de llorar. Fue El peor día de mi vida, sentía un vacío enorme en el pecho y mi corazón estaba destrozado. Me sentía sin vida...

Así pasaron los días, no salia del grado,no hablaba ni sonreía. Aunque varias personas trataban de sacarme una sonrisa no lo lograban,nadie lo hacía. Miryam a veces se quedaba a hacerme compañía pero seguía sintiéndome como un fantasma. Días y semanas fueron los que compartíamos miradas vacías en los colectivos. Una vez quisiste hablarme y me bajé el colectivo llorando,dejándome la única opción de volver caminando a mi casa,así fue por un mes. Ya no sentía nada,no me importaba si comía o no. No dormía y no hacía nada más que ir al colegio,volver y dormir. Esa era mi rutina diaria.

2 meses después...

Lluvia,música,una mochila y una ventana eran los que me acompañaban ese día. El viaje iba a ser de más de una hora porque el tránsito estaba demorado,así que la suerte jugo de mi lado porque hace unos días me había descargado bastante música en el celular.

Por fin llegué,casi no había gente porque la mayoría había faltado por la lluvia. Respiré  hondo y Solté ese mismo aire mientras me dirigía hacia el salón. Entré  y estaba vacío,eso sólo podía significar una cosa que la profesora había faltado. Con un poco de mal humor me dirigí a la dirección donde me asignarían a una división.

Caminé lentamente a la puerta, la abrí y te mire. Ese frío de hace 3 meses volvió a recorrer mi espalda, pero segui adelante a sentarme porque ya no sentía nada. no paraste de mirarme hasta que me sente,entonces empezaste la clase que en ese caso era de matemáticas.

Diste varios ejercicios y toda la clase quedó en silencio porque fui la única que había respondido todo correctamente. Todos salieron de aquel asombro cuando los distrajo el sonido de la campana,salieron corriendo al recreo pero yo me quedé ahí,sentada leyendo una especie de diario-álbum.

15 minutos fueron los que me quedé observandolo,cuando entraron 2 chicas que eran amigas de las que había tirado. Las 2 me agarraron con fuerza para que no pudiera irme mientras que la tercera saco una pequeña navaja,me miró con una sonrisa macabra y lo clavó en mi abdomen. Me soltaron y salieron corriendo.

Estaba tirada en el piso,tratandome de poner de pie hasta que lo conseguí,salí y me cruzé con Natalia. Me miró profundamente sabiendo que algo no estaba bien en mi.

-¿estás bien?-la voz con cada letra que decía se le quebraba

-no necesito tú ayuda y menos tú lastima-solté con un tono bajo-métete en tus asuntos y yo en los míos,y nunca más me vuelvas a hablar

Salí del grado para poder llegar al baño y agarrar el botiquin de primeros auxilios,pero mis esfuerzos fueron en vano. A mitad del pasillo empecé a perder mucha sangre,lo que hizo que me desplomara en el suelo y me desmayara. Natalia que me seguía de atrás vio como caía y corrió a mi lado tomandome de la cabeza con suavidad,mientras que otra vez se formaba ese círculo de personas que tanto odiaba.
Lo último que escuché fue:

-llamen a una ambulancia

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Abrí los ojos lentamente y te observé, no podía moverme pero si hablar,a pesar de que ella estuviera ahí,no me olvidé de todo lo que había pasado. La miraba con cautelosamente,como si no la conociera. Es difícil volver a confiar en una persona a la que le diste todo lo  que tenias y te de la espalda.

-¿estas mejor?-preguntó con la voz quebrada, se ve que estuvo llorando mucho ya que tenia los ojos rojos,no le entraba en la cabeza como alguien podría hacerle una cosa así.

-a vos no te importa,así que no te metas en lo que no te incumbe-aunque no me gustaba hablarle así, todavía seguía dolida por como me había hablado.

-Luna,se que todavía éstas enojada por todo lo que te dije, y que no tengo ningún derecho,pero quiero pedirte perdón por todo lo que pasó. Te quiero mucho y me duele no tener tus abrazos o tus "te quiero" todos los días

-A mi no me dolió todo lo que me dijiste,me dolió que no confiaras en mi,después de todo lo que pasé con lo que me cuesta sos la única persona Persona que confió plenamente,y no estuviste cuando yo te necesite, no tenes ni idea lo que me pasó en estos 3 meses;no sabes cuanto llore,cuanto estuve sin comer,sin dormir,sin nadie,no sabes que me llegó una carta que dice que mis papas quieren conocerme y que me vaya a vivir con ellos,pasaste de ser la única persona en mi mundo a ser u na completa desconocida. Yo te perdono,pero no se si voy a poder a volver a confiar en vos.

Esas palabras la habían dejado muda,en 2 minutos se había desahogado completamente. Lo de sus papás hizo que se le hiciera un nudo en la garganta. Sabia que ella tenia razón en todo lo que dijo y lo único que pudo hacer es observarla unos minutos a los ojos y luego balancearse a ella para darle un fuerte abrazo. Sabia perfectamente que hace 3 Meses lo estaba necesitando. Luna no se resistió,simplemente se dejó llevar y así estuvieron por varios minutos.

Luego de que le dieran el alta,se fue a vivir con ella ya que no quería saber absolutamente nada de sus padres. A las 3 chicas que cometieron eso,las expulsaron de inmediato y las mandaron a 5 años a un reformatorio fuera de Buenos Aires. Una vez en paz,ambas pudieron empezar de nuevo y Natalia se convirtió en su tutora,o mas bien,en su madre materna y del corazón.

Se que tarde pero espero que les haya gustado. Les recomiendo leer mis otras historias y nos vemos luego!!!!!😘😘😘😘😘

-L