Memorias de una Prostituta

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A muchos nos hubiese gustado un final distinto, quizás estúpidamente feliz. De esos que dejan la conciencia tranquila. Pero, por el contrario, el libro acaba con la idea ambigua de que pudo no ser así, o tal vez sí, pero no lo aclara. Lo que hace que volvamos sobre el mensaje de las muertes, la violencia y adicciones, sobre los finales de las compañeras de Anastasia mencionadas a lo largo del libro y, por tanto, nos quede la conciencia intranquila.

Memorias de una prostituta es la historia de una mujer y sus circunstancias. Ninguna vida es fácil. Todas las vidas exigen lucha y sanación, todas. Ni la de Anastasia, ni la mía, ni la vuestra, serán la excepción a esta regla que Anne Smith nos muestra con tanta crudeza.

                                                                                                                Isabel Ali

AGRADECIMIENTOS

El camino que he recorrido fue muy largo, triste y peligroso, conocí a gente de todas las clases con diferentes perfiles psicológicos cada uno con sus miedos, sus traumas y sus enfermedades psicológicas... muchos ya no sabían ni que sus propias almas habían perdido el horizonte. Aprendí a no juzgar a nadie, pues no todos tienen la misma capacidad de razonar y de ver las mismas cosas que nosotros.

Hay personas que tienen el don de la fuerza y de la autosuperación y hay personas que son totalmente frágiles... Me enorgullezco de mí misma por haber cruzado estas tierras difíciles y raras de la prostitución y haber salido de ellas sin dejarme corromper por las drogas, por la lujuria o por la envidia. Mi alma permaneció intacta, mis principios y valores no cambiaron; al contrario, se han fortalecido más. Es más importante saber salir que entrar en este pequeño y mezquino mundo que es el de la prostitución.

Agradezco a todos aquellos que se han cruzado en mi camino. Si me han aportado experiencias buenas o malas —no importa— pues me han hecho más fuerte, y cada vez que caí me levanté, una y otra vez... A todos los que me han dado la mano; puede ser que ya no se acuerden de mí, pero yo sí los recuerdo y los llevo en mi corazón. A mis hijos, que me han mantenido en el buen camino; “ellos no saben la verdad, pero para hacer el bien no es necesario saberla”. A mi madre que, después de todo, se convirtió en mi brazo derecho. Nunca es tarde para volver a empezar; lo más bonito que existe en un ser humano es la capacidad de pensar, reconocer, perdonar y comenzar; yo llamo a esto resurrección. He aprendido y he conocido  el  sentido de la palabra resurrección, en este camino he muerto y he resucitado más de un millón de veces. Un especial agradecimiento a la escritora Isabel Pisano, que me inspiró y me apoyó en este libro, la tengo en mi corazón.

Muchas veces me creí indigna de hablar con Dios por ejercer la prostitución, sentía vergüenza de dirigirme a Él, mil veces le pedí perdón, mil veces le agradecí su protección, más de mil veces me arrodillé delante de Él y bajé mi cabeza. Dedico este libro a todas las Magdalenas que están por el mundo y lo único que pido a Dios es que las proteja, las bendiga y que mire por sus hijos, porque es lo más precioso que ellas tienen en sus vidas y es por quienes dan su sangre.

Anne  Smith

EQUILIBRIO

Soy luz, soy oscuridad. Soy vida y muerte...

Soy el soplo de esperanza...

Soy la madre, la hermana, soy la hija…

Soy la navaja que corta, soy aquella que da la vida…

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⏰ Última actualización: Jun 15, 2012 ⏰

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