Capitulo 1.Deslealtad de Anthony

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PRIMERA PARTE

El reloj marcó las dos e indicaba que era hora de ir por mi hermana a su colegio. Se complica la vida, si tan solo durara más de una semana con sus novios no pasaría esto de estar yendo por ella porque se siente triste y quiere un abrazo. Lo único malo que tiene Abi es que no puede vivir sin un novio.

Llegando a su colegio me en la mera entrada buscándola. No veo a Abi por ningún lado, por más que la busco no aparece.

De pronto, vi a lo lejos a una persona contraída, sentada en el suelo. Fui corriendo al darme cuenta que era Abi. Esta vez no estaba llorando solamente por su novio, sino que también por el golpe que traía en su ojo.

—¿Quién te hizo esto?—Le preguntó molesta, imaginandome miles de respuestas para esa pregunta.

—Julián mando a que me golpearan. Yo no hice nada, Julián cree que lo engañe, pero no es cierto—sus ojos se le llenaron de lagrimas, arruinando su maquillaje.

Me dio tanto coraje. ¿Qué clase de persona manda a pegarle a su novia?

No conozco a nadie de aqui pero eso no justifica que no me diera la tarea de ir  buscar al famoso Julián. Empecé por preguntarle a las personas que estaban cerca de nosotras. Se quedaban callados y solo me veian con temor, hasta que una joven me señalo a un tipo y dijo que él se llamaba Julián. No lo pensé dos veces y fui hacia él.

—Oye, ¿tú eres Julián? —Toque su hombro para que volteara.

—Sí—me vio de abajo hacia arriba— ¿Por qué?

Me dio rabia al ver su cara de desprecio cuando y lo único que pude hacer fue soltarle un puñetazo, que al parecer le dolió.

—¿¡Qué te pasa loca, por qué me golpeaste!?

—Por haberle mandando a pegar a mí hermana.

—No seas tonta, de seguro tu hermana es Abi y ella anda con el Julián de allá—me señalo a un tipo que estaba coqueteando con otra chava en el puesto de papas—.Por dios, ¿crees qué me voy a fijar en tu hermana?

Quería que me tragara la tierra, sus amigos se empezaron a reír a carcajadas, mientras Julián segundo se sobaba la mejilla, le estaba empezando a sangrar y fue porque con la mano que lo golpe tenía mi anillo.

—Perdón, no fue mi intención, bueno sí, pero pensaba que tú eras Julián, el novio de mi hermana—empecé a tocarme los bolsillos de mi chamarra para ver si encontraba una cinta especial de cortadas, por suerte la traía. Extendí un cacho de cinta, la corte con mis dientes y se la puse en su cachete antes de que pudiera negarse.

—¿Qué haces? ¿Qué me pusiste?

—Una cinta para que no se te infecte tu herida—dije en lo que quitaba mis manos de su cara.

Empezó a tocarse su cachete, creo que él tenía su piel más cuidada que la mía.

—Todavía no estás perdonada—dijo con despecho.

—Yo te pedí perdón, si tú no quieres aceptarlo es tu problema, no el mío.

Abi se acerco a mí y me dijo que ya nos fuéramos, el tipo solo se quedo parado viendo como nos marchábamos.

—Alex eres una boba, golpeaste al chico equivocado, ¿te das cuenta?, me trataran peor ahora.

—Eso pasa por no presentarme a tus novios, Abi.

Puso los ojos en blanco y con su pañuelo se seco las lágrimas. Sonrió y me dio un ligero abrazo.

Llegamos a la casa, Abi me dio las gracias y se fue a su cuarto.

Por mi parte, yo tenía mucha tarea.

Cuando estaba acabando mi tarea, escuche a Abi hablando por teléfono .Subí las escaleras lo menos escandalosa que pude y me acerque a escuchar. Terminé escuchando como lloraba. Lo mejor era dejarla sola, para que pensara bien las cosas.

Decidí salir al parque a fumarme un cigarrillo. Me encanta ir a ese parque, porque era el que menos gente tenía.

Me duro poco el gusto porque Abi fue a buscarme para que la llevara a la casa Julián.

—¿Crees que te voy a llevar con ese patán? Regrésate a la casa.

—No es un patán Alex, por favor llévame no seas mala, es el último favor que te pido.

—Ya te dije que no Abi, deja de molestarme, quiero estar sola.

Se marcho enojada y susurrándose cosas entre sí. No pasaron ni dos minutos cuando vi a lo lejos una personita enana caminando cruzándose la avenida.

En seguía me pare y empecé a seguirla. Si mi mamá se entera de que la deje ir sola me matara.

Toque el timbre muchas veces.

Me abrió Julián segundo.

—No me digas que viniste a disculparte hasta acá.

—Abi entro aquí, quiero asegurarme de que no le pase nada, permiso—le dije al mismo tiempo que entraba a la casa.

—Tu hermanita esta con Carlos arriba—susurro en mi oído.

—Oye podrías dejar de hacer eso, ya no te hagas el gracioso— lo empuje—. La neta es que me caes mal, asi que déjame.

Subí las escaleras donde me había dicho que estaba Abi, pero no veía nada más que muchas puertas en un largo pasillo.

—Déjalos en paz, parece que te gusta el novio de tu hermana.

—Otra vez, ¿qué no tienes otra cosa más que hacer?

—Estoy aburrido, solo quiero un poco de diversión. Todos mis amigos están con sus novias excepto yo.

—No te conozco así que déjame.

Pareció sorprenderse porque dijo:

—No puedo creerlo, no me conoces, se me hace que te estás haciendo, porque a mí me conocen muchas personas.

—Acabas de decirlo, te conocen muchas, pero yo soy de la pocas que no te conocen, mira, por favor dime dónde está Abi solo quiero asegurarme de que este bien.

—Hasta que me pidas perdón.

—¿Sabes qué?, gracias yo la buscare.

Empecé a abrir todos los cuartos pero justamente cuando iba a abrir uno Julián me detuvo.

—¿Ahora qué? —Le pregunte.

—Ahí no puedes entrar.

— ¿Por qué?, ni que fuera tu casa.

—No te conviene, créeme, si la abres ya va a hacer tu problema, adelante—se encogió de hombros y se quito de la puerta.

En cuanto abrí la puerta, me lleve una gran sorpresa.

—¿Tony?

Es Tony con otra mujer, mi novio con el que llevaba dos años de relación está enfrente de mí besuqueándose con alguien más.

En cuanto me vio quito a la mujer que estaba encima de él, empujándola al otro lado de la cama, se abrocho la camisa y fue hacia mí.

—Alex, te lo puedo explicar.

Y mientras mis ojos se tornaban borrosos cerré la puerta de un jalón. 

El miedo a enamorarme -SIN EDITAR-Where stories live. Discover now