FRASES Y TEXTOS DE ANATOMIA DE GREY

13 Temporada

13x01. Deshacer

¿No desearías poder retirar eso que dijiste, eso que hiciste? No hay ningún botón de ''deshacer''. Solo hay esperanza de que aprendamos, de que podamos cambiar. ¿Verdad? Podemos hacerlo mejor. No podemos deshacer lo que hemos hecho. No podemos deshacer el pasado porque el futuro sigue llegando. Lo mejor es dejar el pasado atrás. Pasar página. Aprender de él. Si no aprendemos de nuestros errores, terminaremos encerrados en un futuro que nunca habríamos elegido. El pasado está escrito, no puede cambiarse. Lo hecho, hecho está. Pero el futuro podemos elegirlo, para bien o para mal.

Has bebido demasiado, ¿vale? La has jodido. Y ahora todo se a derrumbado a tu alrededor. Bueno, pues has acudido al tío adecuado porque he estado en tu lugar más veces de las que tú lo harás jamás. Y te puedo decir, por experiencia, que con un poco de café y la luz del sol. tus problemas parecerán más pequeños y el mundo seguirá girando.          Richard

- Y qué es lo tuyo, ¿lealtad ciega?

- No es ciega, se la ha ganado. Cuando entramos aquí por primera vez, él era una de las peores personas que había conocido en mi vida. Ahora es una de las mejores. Y sé que ambas personas están aún ahí dentro. Solo quiero asegurarme de que la correcta gane.    Warren y Meredith.

13x02. Catástrofe y la cura.

Como cirujanos, somos los guardianes de nuestros hermanos. Pase lo que pase. Desde que nacemos hasta que morimos. Vemos nuestros mutuos miedos, vemos el pánico aterrador al fracaso, nos vemos a nosotros mismos. ¿Y a quién coño le gusta mirar eso? Entramos por estas puertas como internos. Resentidos, solitarios, estrellas del rock inferiores a las puertas de la grandeza. Nos lanzan a fondo juntos, nos dicen que salvemos vidas juntos, que nos salvemos los unos a los otros. Nos convertimos en familia. E incluso cuando la cagas de verdad, la familia siempre esté ahí. Siempre está disponible. Desde que nacemos hasta que morimos. Pase lo que pase.

13x03. No soy un hacedor de milagros

Cada paciente que recibe malas noticias quiere ser la excepción, el uno entre un millón, el milagro. Pero los cirujanos no creemos en los milagros, nosotros tenemos que hacer que sucedan. Los milagros son siempre grandes. La fiebre se va. Los puntos aguantan. El hueso se cura. Por eso pueden ser difíciles de localizar y por eso pueden ser un incordio tan grande. No me malinterpretéis, los pequeños milagros son geniales. Un milagro pequeño es un milagro, es solo que podría no ser suficiente para salvarnos.

13x04. Cayendo lentamente

Cuando más fuerte sea el golpe, más dolerá. Así suele ser. Por eso recetamos: calmantes, hielo, compresión, elevación. Cosas que detienen el dolor inmediato. Pero solo se puede mitigar el dolo un tiempo y, cuando se pasa el efecto, es cuando realmente duele. Estas curas se llamas provisionales por un motivo. Nunca han estado destinadas a durar para siempre. Entonces, ¿Qué pasa cuando te encuentras con una cura más permanente? ¿Luchas contra ella? ¿Intentas resistirte? ¿O te hechas atrás y decides que quizá la aceptación es la mejor cura de todas?

13x05. Desde ambos lados

Muchos chistes de médicos empiezan así: ''tengo una noticia buena y otra mala''. A menudo, la noticia mala es tan mala que, cuando ocurre algo bueno, solemos exagerarlo. Todas las nubes son pasajeras, pero siguen siendo nubes. Una nube puede significar una llovizna o una tormenta. Así que aprovechas tus días buenos, intentas ser positivo, intentas recordar que incluso una mala noticia es una buena noticia para alguien.

13x06. Rugido

¿Conocéis la historia de un niño atrapado bajo un coche cuyo su padre saca una fuerza sobrehumana para levantar el coche y salvarle la vida? Siempre me he planteado si era real, si alguien querido correria peligro, ¿Se despertaría mi instinto? Sabría qué hacer? ¿Levantaría el coche saltaría para recibir la bala? ¿Podría dejar inconsciente a alguien? Quien pensar que sí. Cuando alguien querido corre peligro físico, buscar la fuerza que necesitas para salvarlo es fácil. Pero, a veces, la amenaza no es física. A veces, la amenaza va más allá. Y, en ese caso, el instinto no puede salvarte. Ni la fuerza sobrehumana, ni un subidón de adrenalina. No puedes levantar el coche estrellado. Solo puedes sentarte..y esperar..y desear que las cosas cambien.