CAPITULO 8 Querer es poder.

890 57 1
                                    


---En el set---

-He llegado mis amores. –camine hacía mis asistentes.
-No les digas así a esos idiotas. –gruñó Alucard.
-No seas celostino. –bromee.
-Eres mía, y de nadie más.
-Ah, -suspire- en verdad eres tan posesivo.
-Porque soy tu prometido y les prometí a mis papitos suegros que te cuidaría y no dejaría que ningún otro imbécil se te acercará.
-Hablare con mis padres, -suspire- no entiendo como los conociste.
-Se todo de ti amor mío.
-Ya me está dando miedo. –murmure.
-Nunca los entenderé. –suspiro Mike.
-Son raros pero bueno. –comento Sebas abrazando a su uke.
-Waaaa, n-no me abraces. –se estremeció Mike.
-Me encanta cuando te vuelves tsundere, así puedo ser salvaje contigo. –sonrió perversamente Sebas.
-Kyyyyyyaaaaa, -grite- por favor déjenme grabarlos.
-JAMÁS. –gritaron los dos.
-Bueno al menos sean el trío demonio.
-QUE NO.
-A mí me encantaría probarlo. –comento Claude tomando la mejilla de Mike.
-EN TUS ESTUPIDOS SUEÑOS MALDITA ARAÑA RASTRERA, DESECHO DE LA VIDA, ADEFECIO MAL HECHO. –grito Sebas.
-Creo que alguien escucha todos los días Paquita la del Barrio.
-Es verdad. –respondieron todos.
-Que tiene de malo, -murmuro Sebas- sus canciones son buenas.
-Ja, ja, si claro. –reí.
-Yo quiero saber algo. –comento Mike.
-¿Qué? –lo mire.
-¿Por qué yo soy el uke? ¿Por qué no seme?
-Digamos que, -suspire- tienes perfil de uke, lo siento.
-¿Ah?
-Eres tan tierno y tus rasgos finos, además mi audiencia quería que lo fueras y bueno, ya lo eres, -susurre en su oído- ¿Cuántas veces te ha hecho gemir Sebas?
-ESO NO SE PREGUNTA.
-Pero te ha gustado, no lo niegues.
-Bueno eso es algo... -se sonrojo.
-¿Lo ves? Eres uke y siempre serás así.
-Eres la peor...
-KRIS ESTAMOS AL AIRE...





-MUY BUENOS DÍAS, TARDES o NOCHES tengan todos ustedes a su programa favorito "CAMBIO DE VIDA", -sonrió- me presento mi nombre es Kris Landeros y soy la conductora de este bello programa, les presento de nuevo a mis asistentes; ellos Miketsukami, Sebastián, Claude, Will y Alucard.
-Bienvenidos. –hicieron una reverencia.
-Son tan monos, -susurre- me alegra de verlos de nuevo, espero que estén muy bien porque yo los he extrañado tanto.
-Sí claro. –dijo sarcásticamente Mike.
-O te relajas o te meto a una orgía. –lo mire.
-N-Nada.
-Tenemos muchas cosas por delante, primero porque hoy Neko fundashi estará con el trío rosa y creo que traerá algo que todos queremos, salseo, pasión, lemon kyaaaaa.
-Tengo miedo, se vuelve más perversa. –murmuro Mike.
-Yo te protegeré amor mío.
-I-Idiota. –se sonrojo Mike.
-Por favor guarden silencio. –los mire.
-Perdón...
-Bueno antes de pasar a ver cómo están ahora nuestras parejas, veamos primero todo lo que ocurrió anteriormente, porque hicieron muchas cosas, y zukulentas, bueno pasemos a verlos y luego volveremos al set...



---TRÍO ARCOÍRIS---

Maya llevo a Misaki a la Universidad puesto que ambos iban en la misma universidad, "por pura casualidad. El seme tenía tomado de la mano al pobre uke quien estaba sonrojado, mientras que el seme reía de sus actitudes.

-¿No crees que deberíamos soltarnos? –pregunto Misaki.
-No, -lo miro- me es satisfactorio tener tu mano.
-Etto...
-Misaki, -susurro en su oído- me quede con ganas de más.
-¿Eh? –se sonrojo.
-Que quiero tenerte de nuevo, quiero hacerte mío hasta el descanso. –sonrió.
-¡Q-Qué estás diciendo! –se sorprendió- Eso es...
-¿Acaso no te gusto? –lo interrumpió.
-No es eso.
-¿Entonces si te gusto?
-Sí, digo no, nooooo. –dijo el castaño alterado.
-Jajajaja, -se carcajeo Maya- eres tan lindo.

Los dos llegaron a la Universidad muy temprano para ser exactos. Maya como no quería desaprovechar el momento toma la mano del pobre uke y lo llevo hasta el baño encerrándolo en un cubículo.

-¿Q-Qué haces?
-Misaki, -lo beso- necesito tocarte un poco.
-E-Espera...
-No puedo, en verdad solo te lo metí una vez.
-No digas eso. –se sonrojo.
-Por eso digo que te toca.
-¿Eh?
-Maya se sentó en la taza del baño y sentó a Misaki en sus piernas, empezó a masajear la entrepierna del uke mientras lamía su cuello.
-E-Espera, -intento no gemir- M-Maya esto no está bien.
-¿Por qué no?
-E-Estamos en la Universidad.
-Entonces, -sonrió- si estuviéramos en la casa, ¿estaría bien?
-E-Eso no es lo que quise decir.
-En fin, una vez que comencé no terminaré.

Misaki se estremeció al sentir como el miembro de Maya comenzaba a reaccionar y rosar su trasero, empezó a ponerse nervioso.

El seme saco el miembro del uke y comenzó a masajearlo lentamente mientras besaba su cuello y repartía algunas mordidas, en sus hombros ya desnudos.

-M-Maya, -gimió Misaki- m-más.
-Me encanta cuando eres más cooperativo.
-N-No lo digas. –se sonrojo.
-Misaki.

Tomo la cara de Misaki con su otra mano y volteó al uke para besarlo apasionadamente mientras seguía masturbándolo.

-Ahhh, a-hhh.

Escucharon como la puerta de los baños se abría y escucharon varias voces.

-¿Trajiste la tarea de economía?
-No, me quede haciendo el ensayo.
-Es verdad, es para hoy, lo había olvidado.

Misaki se tapó la boca para no gemir mientras Maya lo levantaba y lo sentaba para verse de frente, saco su miembro y tomo ambos masajeándolos lentamente.

Misaki lo veía con suplica, se sentía tan nervioso de que ellos siguieran ahí hablando mientras Maya lo tocaba deliberadamente.

-Misaki, -murmuro en su oído- quiero correrme dentro de ti.
-I-Idiota ahhhh.

Se tapó de nuevo la boca.

-¿Escuchaste eso? –comento uno de los chicos.
-No.
-MMM, mejor vayamos al salón para acabar.
-Claro.

Misaki sentía que no podía suprimir sus gemidos, así que abrazo el cuello de Maya y comenzó a besarlo apasionadamente mientras este aumentaba el ritmo de movimiento de sus manos.

Masturbaba sus miembros hasta que el uke no pudo más y se corrió primero para después de unos momentos Maya lo hizo.

-Baka. –se quejó Misaki cuando Maya lo limpió a él y así mismo.
-Hacerlo en la Universidad es tan excitante.
-Pervertido. –se sonrojo.
-Seguramente te gusto.
-Jamás.

El seme se acercó hasta su oído y susurro.

-Prometo ir hasta el final después, nada impedirá que estaré dentro de ti por muchas horas.


Cambio de VidaWhere stories live. Discover now