This is The End [Nikolai Fraiture]

#1

Fue un sábado por la tarde, cuando el sol estaba a punto de esconderse, el día en el que sus caminos se cruzaron.

Había pasado toda la tarde, o quizás, todo el día buscando un Fender Jazz Bass. Si había algo, que ella nunca hacía, era darse por vencida. No le conocía el rostro a la derrota.

Quedaba solo una tienda de mala muerte en su lista, todas ya las había recorrido, y no obtenía resultados.

La tienda quedaba en un callejón sin salida, lo único limpio en aquel lugar, tal vez, era ella misma. Y para una joven ambientalista como ella, era algo inaceptable.

Al llegar se encontró con toda la basura derramada, le enfadaba demasiado, que las personas no cuiden lo único que les proporcionaba oxígeno y el único lugar habitable.

Entró directo a quejarse, gritar, o intentar hacerlo. Porque ella no sabía gritar.

-Hola...Disculpe-habló con el chico que atendía-Creo que no sería mucho trabajo tirar la basura en los contenedores ¿Puedo sugerirle, si no es mucha molestia, que sea un poco más cuidadoso?

Él muchacho soltó una fuerte carcajada y recurrió al sarcasmo.

-Claro, claro, como usted diga.

La joven le dedicó una sonrisa satisfactoria

-¡Gracias! ¡Es usted muy amable!

-Disculpe-un joven interrumpió-¿Cuánto me dan por un Fender Jazz Bass?

-¿Tienes los papeles? Es decir, la órden de compra y los tickets del mercado.

-No, es un regalo de graduación-contestó con cara de pocos amigos

-Lo siento, es imposible.

El muchacho salió apresurado por la puerta, con la funda del bajo colgada en su espalda. La muchacha comenzó a seguirlo. Era tan inocente, o estaba tan desesperada por aquel instrumento, que no se daba cuenta que el muchacho del bajo, no tenía ningún interés en hablar con ella.

-¡Disculpa!-corría detrás de él-¡Hey! ¡Te estoy hablando!

No obtenía resultados, el chico ni siquiera volteaba a verla. Logró alcanzarlo, y lo tomó de los hombros.

-Siento el atrevimiento. Pero, recién en la tienda...¿Dijiste un Fender Jazz?

-Sí.

-Esto es un milagro ¡estuve buscando uno todo el día! ¿cuánto quieres por él?

-No está a la venta.

-Pero...te acabo de escuchar decir...

-Disculpa, creo que no entiendes. No estoy interesado, lo siento.

El joven comenzó a caminar aún más rápido.

-¿Sabes que eres un grosero?-gritaba ella corriendolo y sin obtener resultados-¡No se le habla así a las personas!

Él soltó un suspiro y se dió la vuelta.

-¿Qué demonios quieres?

-Creí que te lo había dicho.

-El bajo no esta a la venta.

-¡Podemos llegar a un acuerdo! Si es el dinero lo que importa, lo tengo.

-Escucha, no quiero ser grosero contigo, pero...Eres jodidamente molesta.

-¿Qué harás con el bajo? Nadie te lo comprara sin los papeles, es decir, ninguna tienda. Si una tienda pésima te dijo que no, imagínate las demás.

-Está bien. El bajo es un regalo de graduación, me lo regalo mi abuelo, y quiero tenerlo cerca. Por eso, se lo regalaré a un amigo. Sólo quería saber el precio por si algún día necesito un favor de él ¿contenta?

-¿Tu amigo puede vendermelo?

-No creo que esté interesado.

-Puedo ofrecerte un trato para que lo tengas cerca.

-¿Me favorece?

-Obtendrás dinero.

-Habla.

-Bueno, puedes prestarmelo y te pagaré hasta que consiga uno.

-¿Crees que le prestare mi bajo a una desconocida?

-No somos desconocidos, llevamos diez minutos conversando.

-¿Conversando? Querrás decir tu hablando.

-Te puedo dar mi dirección, mi teléfono, lo que quieras.

-¿Tengo opción?

-De hecho, no.

-Esta bien, chica molesta.

-Mi nombre es Angustia.

-Angustia-comenzó a reír-Mi nombre es Dolores.

-¡Ese es mi segundo nombre! ¿Tus padres también leyeron el libro de nombres?

-Me estoy burlando de tí.

-¡Ah! ¡Qué divertido! ¿Y yo que debo hacer?

El muchacho de golpeó el rostro.

-Nada.

La muchacha se pusó en puntas de pie y lo tomó del hombro para depositarle un beso en la mejilla mientras le entregaba un papel con su número de teléfono.

-Adiós, Dolores.

Él soltó un suspiro.

-¿Porqué a mí?-susurró

Angus caminó unos pasos lejos de él, lo suficiente para que el se lamentara por la tontería que acababa de hacer. Entonces, cuando creyó que la pesadilla había acabado, ella se dió vuelta con mil cosas que decir, aunque solo se limitó a decirle unas palabras.

-Eres bonito.

N/A: HOLA WACHAS

al fin un fic del mueble <3

Bueno sé que es una mierda pERO BUENO ES EL PRIMER CAPITULO *los siguientes eran peores*

esto seguramente sea malísimo porque no estoy acostumbrada a narrar de esta manera jaj yyyyy además el personaje principal es totalmente nuevo para mí ya que siempre uso las mismas personalidades creo pero espero que de todas formas les guste *no la lee nadie*

bueno chiks nada ahre las tkm y espero que les guste <3

nos re vimo

sueñen con nikolai tocandolas con su dedo chueco *emoji pervertido*