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Ambos protestaban ya que no querían y no aceptaban él resultado hasta que ambos recibieron manotazos en la cara para que aceptaran él reto y forzados lo hicieron. Tardaron varios segundos hasta que sus labios se juntaron y dentro de ellos cambió pero ni sabían bien lo que era. Dos segundos después se despegaron rápidamente y se sonrojaron y Alex no paraba de pasarse las manos por la boca como para intentarse quitarse algo y Pablo escondió la mirada entre las rodillas.
Lorena se despidió por Pablo por que no podía respirar y se le llevó a su casa para que pasara la noche ahí. Y Valencia se quedó consolando a Alex toda la noche

Amar en BarcelonaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora