Las Elegidas de la Naturaleza

Sorpresas Inesperadas

-Luci

-Dime, ¿Qué pasa?- me habla con voz ronca y curiosa

-Te buscan allá abajo.

-¿Quien?- se endereza sorprendida.

-Un chico llamado Stefan- le digo sin mas.

-Oh, de acuerdo, bajo en un momento- se ve un poco mas animada, mientras busca algo que ponerse, y eso hace que me saque una gran sonrisa.

-Estaré en mi cuarto por si necesitas algo ¿Eh?- le hago saber pero ella mas ocupada cambiándose, salgo de su cuarto y me voy al mio.

Lucia
Me pongo lo primero que encuentro a la mano ( una camiseta negra vieja, surte gris, y unos pantalones de chándal azul marino ), me hago una cola de caballo. Y por primera vez no me preocupa como me vea ante la gente, después de lo de Matt, no tengo fuerzas para hacer nada. Bajo las escaleras en dirección a la sala y veo a Stefan sobre el sofá, cuando Mia me conto que estaba aquí, no podía creerle, me sorprendí muchísimo al ver que estaba aquí en mi casa.

-¿Stefan?- alza la vista y se pone de pie dedicando me una sonrisa de oreja a oreja- ¿Qu-que haces aquí?

-Hola otra vez Lucía, perdón por venir sin avisarte, pero dejaste esto en mi auto- me muestra mi teléfono alzándolo sobre mi cara-Te vez tan encantadora- me dice burlón, y hace que me sonroje-Te iba a llamar para devolvértelo, pero como yo tenia tu celular y no tengo el número de tu casa, entonces creí que seria mejor traértelo en persona.

-Ah.. este...Hola y gracias- le digo tomando mi teléfono de entre sus dedos.

-No fue nada, de todas formas habría inventado una excusa para poder volver a verte- veo en sus ojos que es verdad que quería verme otra vez y eso provoca que me sonroje aun mas- Además, si no fuera por que olvidaste tu teléfono, no podría verte , al Natural- bajo la vista avergonzada.

- Me veo tan mal, ¿verdad?- susurro- De haber sabido que vendrías, me hubiera puesto otra cosa- lo veo a los ojos y veo que al oír mis palabras sus ojos brillan con gran intensidad.

-Te habrías arreglado, ¿solo por que vendría?

-Yo...

-No tienes nada de lo que avergonzarte Lucía, creo que te verías igual de linda incluso vistiendo una cortina- me rio al pensarlo y el se une a mis risas, parece que fueron años y no días desde que he vuelto a reír y es muy gratificante. Estaba por responderle pero en eso alguien llama a la puerta

-Me disculpas, voy a ver quien es.

-Claro.

Voy a la puerta con una sonrisa de felicidad, y eso se lo debo a Stefan, el Señor de las Tonterías, me rio mientras abro la puerta, pero mi risa se apaga al instante al ver quien esta frente a mi. Y no es nada mas ni nada menos que mi exnovio Matt, por lo que veo no esta muy bien que digamos no es el mismo Matt alegre y seguro de si mismo que conocí hace poco, ahora es lo que queda de el. Se ve que no ah dormido en días y que también ha llorado, trae una cara de triste y arrepentimiento que nunca le vi antes.

-Lucia- pronuncia mi nombre con gran anhelo y esperanza.

-¿Que quieres Matt?- digo a media voz, se que es por que estoy apunto de llorar como nunca, pero contengo las lagrimas para no darle el placer de verme así.

-Yo solo, no quise que nada de esto pasara Luci...- a estas alturas yo ya estaba temblando de la rabia de verlo, pero al oírlo decir mi nombre así, una gran tristeza me taladraba el corazón.

-Pero paso y no hay nada que lo pueda arreglar- le digo lo mas serena y tranquilamente que puedo sin que se note que estoy todo lo contrario a tranquila.

-Lucia, yo te quiero, por favor debe de haber algo... - dice con voz temblorosa.

-Ja, si me amaras, no me hubieras roto el corazón- le digo con voz firme lanzándole una mirada fría- Solo estas aquí para poder estar en paz contigo mismo, para que no te coma el remordimiento.

-No nada de eso mira, puedo explicarte, yo nunca traicionaría tu confianza, ella se me insinuaba mucho, yo nunca la tocaba o la besaba y no te lo dije por que no quería que esto pasara, ese día ella me beso...

-¿Y eso lo justifica?, Por Dios Matt yo misma vi como le regresabas el beso- ya no pude contener mas mis lagrimas y me puse a llorar,

-Por favor Luci, quiero volver a lo que teníamos juntos, yo..

-Ese es el problema , una relación debe de haber confianza. Y tu perdiste por completo la mía, cuando me mentiste, no cuando la besaste si no cuando no me mentiste- le dije entre sollozos.

-Luci, Te quiero, quiero estar a tu lado sin importar que...- dice desesperado

-Pero yo ya no, yo ya no quiero tenerte en mi vida. Adiós Matt- cierro la puerta sin esperar su repuesta, después de unos minutos oigo como camina hacia su auto y se marcha. Sigo llorando junto a la puerta, cuando siento unos brazos que me rodean para abrazarme y al instante se que se trata de Stefan- ¿Nos escuchaste?

-Era imposible no oírlo- lloro aun mas y el me abraza aun mas fuerte- Shh, tranquila todo saldrá bien. En un tiempo, abras olvidado a ese patán, y tu y yo nos reiremos de lo marica que es y sobre como dejo su trasero en sus pantalones- me rio aun sollozando, y agradezco el esfuerzo que hace por alegrarme- Oye mírame,- me toma la cabeza entre sus manos y me hace que lo mire a los ojos- Ya no llores, se que duele, no te mentiré va a ser duro, pero te prometo que yo te ayudare, se que apenas nos conocemos pero aun que llevamos poco tiempo de conocernos quiero que seas feliz y odiaría volver a verte así.- algo pasa por su cabeza que su mirada se vuelve fría- Si fuera por mi en este mismo instante iría por ese idiota ahora mismo, y haría que se arrepintiera por haberte hecho llorar- no puedo evitarlo y le sonrió, pero una sonrisa genuina- ¡Ves esa es la sonrisa que más me gusta!

Nos quedamos mirándonos fijamente durante horas, minutos, segundos, y solo se que quisiera seguir así, con el sacándome una sonrisa, haciendo me reír como nunca antes nadie me había hecho reír jamás, y quiero que siga diciendo me cosas lindas , y quiero seguir junto a el, por que estando a su lado me siento segura puede que sea raro y muy rápido el desear tenerlo junto a mi si apenas y nos conocemos pero no puedo evitarlo, se siente bien, se siente correcto.