- No lo creo hermoso, te aseguro que yo ganaré y te haré sufrir dejándote con las ganas.- Se alejo de mi.
- ¿Hermoso?.- Dije coqueto.
- ¿Qué quieres, baboso?.- La mire mal haciendo que ría.
- ¿Y si empezamos mañana?.- Le suplique.
- Que no Sartorius.- Dijo ya cansada.
- ¿Por que no?.- Exclamé caminando hacia ella.
- Por que no.- Fue a la cocina.
- Esta bien.- Me rendí y me fui a sentar al sofá.
- ¿Te enojaste?.- Se sentó a mi lado.
- Pff.. No, como crees.- La mire haciendo que quedemos a pocos centímetros, ella miraba mis labios y yo los de ella. Me acordé del trato y me paré enseguida, no quería perder.
- ¿Qué?.- Al parecer se le había olvidado el trato.
- ¿Te has olvidado del trato?.- Ella abrió los ojos como platos y se recostó en el sofá.
- No, claro que no... Sólo.- No pudo terminar ya que se escuchó un trueno, ella dio un brinco.
- ¿Te dan miedo los truenos?.- La mire con cara de burla.
- No... Claro que no.- Dijo nerviosa.
- ¿Te acuerdas que te dije que hicieras un trato que NO me haga sufrir?
- Si. ¿Qué tiene?.- Se volvió a sentar en el sofá.
- Esto me hace sufrir.- Ella rió.
- ¿Quieres otro trato?.- Me senté al lado de ella.
- Si.- Le suplique.
- De acuerdo. El nuevo trato sera... No se me ocurre nada.- Dijo desesperada.- Ya se. Tienes que limpiar la casa por una semana.- Dijo no tan convencida.
- ¿Qué? Limpiar no es lo mio. Otra cosa.- Le sonrei ella rodo los ojos.
- Es limpiar o un mes sin besos y eso.- Me miro y se paró para ir al patio la seguí.
• Narra Beth •
Salí al patio, tome mi celular que tenían conectados mis audífonos y puse Radioactive de Imagine Dragons.
Radioactive:
Me recoste en el césped y cerré los ojos.
Recuerden que la casa es esta:
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