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Lo mismo que sientes cuando naces, o cuando te despiertas de una larga siesta. Estás perdido, no entiendes nada. Lo único que percibes a tu alrededor son sonidos, imágenes y colores, cosas borrosas y lejanas.

Louis sentía eso a medida que iba abriendo los ojos. Pero una nueva sensación lo invadió cuando estuvo completamente despierto y consciente: tristeza. Ahora se sentía como cuando estás deprimido y te vas a dormir con la esperanza de que el dolor se vaya, pero al despertar nada ha cambiado.

Parecía que había estado un largo rato intentando abrir sus ojos, como si sus párpados estuvieran pegados. Lo primero que vio fueron muchas plantas y árboles cubriendo el cielo azul. Notó que estaba acostado en el suelo, ya que veía todo desde esa perspectiva. Miró hacia un costado y luego hacia el otro, encontrándose con el mismo panorama: sólo vegetación y un poco de luz solar que ingresaba por el poco espacio que les dejaban los altos árboles. Quiso ponerse de pie, así que se aferró con todas sus fuerzas de la raíz de un árbol que tenía a su lado y apretando cada músculo logró sentarse en el lugar. Al hacerlo, soltó un grito desgarrador al sentir como un pinchazo le recorría toda la espina dorsal. Su respiración era irregular y su pecho subía y bajaba demasiado rápido, tenía miedo de que su corazón dejara de latir. Juntó todas sus fuerzas y se arrastró con cuidado hacia el árbol más cercano, apoyó su espalda contra el ancho tronco y allí quedó por un rato. Cerró los ojos y tocó sus piernas como pidiéndoles que resistieran, que no lo defraudaran, que lo sacaran caminando de ese extraño lugar. Y fue allí entonces cuando lo notó, cuando recordó todo lo que había sucedido.

Primero sintió un gran alivio al darse cuenta que estaba vivo, que había sobrevivido a la caída del avión. Porque sí, el avión había caído. Él no había podido hacer nada y el avión simplemente perdió el control estrellándose en lo que parecía una jungla o isla o lo que demonios fuera ese maldito lugar. No podía creerlo, no estaba muerto, había sobrevivido a semejante catástrofe...pero su vida se había terminado. Nunca nadie lo encontraría allí, se moriría de hambre, o de alguna infección, un animal lo comería o simplemente moriría de depresión por la soledad. Y la culpa. La culpa de haberle quitado la oportunidad de una gran y larga vida a un chico como Harry Styles.

Todo se había ido a la mierda. Estaba jodido, completamente arruinado. Esa vez no había escapatoria, no había una salida, un camino. Estaba completamente cerrado y destinado a morir, había aceptado su final. ¿Quién no lo haría en su situación?

"Aa..." Louis abrió los ojos de golpe y miró hacia todos lados ya que había creído oír algo. No vio nada ni a nadie. Creyó que era demasiado pronto para estar alucinando así que se puso de pie dispuesto a averiguar de dónde provenía el sonido. ¿Y si había personas? ¿Y si no estaba perdido ni iba a morir? No le fue nada fácil el ponerse de pie, pero debía hacerlo. Se apoyó en sus manos y tomando impulso desde el suelo y desde las raíces del árbol se empujó hacia arriba y no pudo mantenerse ni dos segundos parado cuando estaba de rodillas en el suelo otra vez. Unos gemidos horribles salían de su boca, sus pulmones no parecían estar funcionando correctamente y por ello cada vez que respiraba un chirrido salía de su garganta. "A-Ayuda...A...yuda" Como si sus sentidos se hubieran triplicado, algo así como el instinto de supervivencia, oyó fuerte y claro esa voz a lo lejos y supo al instante de quién se trataba aunque sólo la hubiera oído unas pocas veces.

"¡Harry!" Gritó con el poco aire que tenía, esperando que el chico, sea donde sea que estuviese, lo oyera. Se impulsó con sus manos una vez más y esa vez sí pudo mantenerse de pie. Ni siquiera se apoyó en un árbol para descansar por el gran esfuerzo que estaba haciendo al caminar luego de semejante accidente, de tan grave caída. El saber que Harry parecía estar vivo lo hizo querer vivir, lo hizo querer luchar para salir de ese lugar y decirle a todos que habían sobrevivido, que eran invencibles y que nada estaba perdido si tenían esperanzas. Cada paso que daba era aún más doloroso que el anterior. Las plantas de sus pies ardían al pisar el suelo que estaba lleno de rocas, ramas y extrañas plantas. Su cadera parecía hacer un ruido raro, como si algún hueso de ese sector estuviera roto o...no sabía, no era un doctor. Ni siquiera quería pensar en su columna, era como tener 90 años de repente y querer tumbarse en una cama y no tener que caminar nunca más en su vida. Pero seguía escuchando a alguien murmurar entre quejidos, y era la inconfundible voz ronca de Harry Styles. Esa voz que a veces utilizaba a propósito, para enamorar a cada persona que estuviera a su alrededor, como un tipo de hechizo o encanto. Y fue cuando vio su brazo tatuado sobresaliendo de una parte del avión que había caído entre una gran planta que comenzó a escuchar el cantar de los pájaros, los sonidos de los animales, el viento moviendo las hojas. Antes no lo había notado, había estado demasiado preocupado pensando en la muerte. Pero no ahora, ahora sólo pensaba en que Harry Styles merecía vivir y en que ambos debían salir de allí. Se agachó lentamente para poder ver el resto de su cuerpo y entonces sus piernas parecieron dejar de funcionar. Un calambre las había dormido completamente y el dolor le hizo soltar un alarido tan fuerte que temió haber despertado a algún animal salvaje, si es que allí había alguno. Luego de inhalar y exhalar repetidas veces intentando eliminar las ganas de cortarse las piernas y terminar con el sufrimiento de una vez por todas, se acercó hacia el brazo de Harry y se hizo lugar entre todas las plantas que lo cubrían. Al ver que se encontraba entero y que aún respiraba, una sensación de alivio y alegría lo llenó por completo. No lo conocía en lo absoluto, no eran cercanos ni nada, pero sabía que si encontraba a aquel chico muerto no podría haber vivido con la culpa. Cuando quitó el pedazo de metal que tenía sobre su torso, el cual no lo dejaba respirar, este se sentó como si lo hubieran empujado y comenzó a toser salvajemente. Louis le hizo palmadas en la espalda aunque dándole espacio para poder respirar sin dificultad. El chico se tocó los brazos, las piernas, la cara, como tratando de descifrar si en realidad estaba vivo. Louis estaba parado a su lado, esperando para ayudarlo a ponerse de pie ya que se sentía un poco mejor. El modelo se apoyó en un árbol para ponerse de pie y cuando el piloto quiso ayudarlo este lo empujó haciéndolo tropezar y casi caer al piso, un golpe más que no necesitaba. "Oye" Se quejó Louis, viendo con el ceño fruncido cómo se ponía de pie y se llevaba las manos a la cabeza. "¿Qué te pasa?" Quiso acercarse a él una vez más pero Harry se abalanzó sobre él.

"¡Es tu culpa!" Gruñó dando largos pasos y quedando cara a cara con Louis. "Eres un maldito idiota al que le confié mi vida al subir a ese avión y ahora MÍRANOS" Gritó con ira esa última palabra y señaló a su alrededor. No se veía nada salvo pura vegetación de estilo tropical. "¿Te das cuenta que es tu culpa?" El joven parecía completamente ido, fuera de sus cabales. Y Louis no lo juzgaba, estaba en todo su derecho a echarle la culpa. Ni siquiera se movería si quería darle un puñetazo. "¿Te das cuenta?" Volvió a gritarle a pocos centímetros de su cara. Fue cuando Louis quedó cabizbajo y asintió que Harry entendió que había pasado un poco el límite. Soltó una risita nerviosa y se pasó la mano por el rostro, tratando así de calmarse. "No puedo creerlo..." Y poco a poco comenzaba la fase de la pérdida de esperanza. "Vamos a morir aquí" Negaba con la cabeza mientras buscaba con la mirada, viendo hacia todas las direcciones. "No hay salida..." Su voz se había quebrado.

Louis se apresuró a hablar para calmarlo y que no perdiera las esperanzas tan rápido. "No, escucha" Harry ni siquiera se molestó en levantar la mirada del piso. "Vendrán a buscarnos, nos encontrarán. Lo prometo, yo-" Y lo interrumpió una vez más, como la primera vez que hablaron.

"Ya cierra la boca, ¿quieres?" Se acercó a él y lo obligó a mirar hacia arriba, hacia el poco cielo que podían ver. "Esa es la única manera de llegar aquí, de entrar aquí. Como lo hicimos nosotros..." Louis lo miró confundido. "Cayendo"

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Capítulo dedicado a Lautaronbenitez <3 Que me rompe las bolas todo el tiempo con este fanfic. Te amo muchísimo, king.

Y bueno...por si aún no lo notaron...esta historia va a tratar de Louis y Harry perdidos en...la jungla(? Espero les guste la trama! Gracias por leer :)


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Lost In Your Eyes | Larry Donde viven las historias. Descúbrelo ahora