—¿Recuerdas algo?—le susurro.

Se vuelve a mirar el espacio vacío en la pared donde estaba el espejo, y luego al suelo.

—No—dice, y vuelve a mirarme, frunciendo el ceño. En un movimiento repentino, él camina rápidamente hacia mí a través de la pared y por el pasillo, alejándose de mí a través de la pared de otra habitación. Apago la linterna y lo sigo, llamando su nombre en voz baja.

Finalmente lo encuentro en mi baño, tumbado en la bañera, mirando al techo.

—Estoy muy enojado, Jane—dice sin mirarme. Me siento sobre la tapa del inodoro para enfrentarme a él.

—Lo siento, Harry—le susurro, alcanzando su mano. La toma entrelazando sus dedos con los míos y guiando mi mano a su mejilla, con los ojos fijos directamente en el techo.

El pequeño cuarto de baño se convierte rápidamente en un congelador debido a Harry, y mi mano se siente como hielo entre su mejilla y su mano, pero yo no.

—Quiero recordar todo—dice con tristeza—. Creo que ir allí ayudará.

—¿Por qué tus padres no se llevaron nada de esto con ellos cuando se mudaron?

Se encoge de hombros.

—Si tan sólo supiera. Estas armas valen un montón de dinero. Fue una estupidez de mi padre el dejarlas aquí. ¿Sabes qué? Fue una estupidez de mi padre haberse ido, igual mi madre. Fue estúpido de ellos mudarse, fue una estupidez de ellos no tomar toda esta mierda que queda en la habitación, y fue estúpido de mi parte dejar que me asesinaran.

—No has elegido que te mataran—le digo.

—Sí, pero debo haber hecho algo muy horrible cómo para que alguien lo haya puesto en práctica. Sabes que era un idiota cuando estaba vivo, ¿por qué te sorprende?

—No quiero tener esta discusión otra vez—digo, tirando mi mano de la de él.

Me agarra de la muñeca, utilizando la otra mano para agarrar mi antebrazo e impedir que me vaya lejos de él. Por último, me mira en lugar de al techo.

—Lo siento—dice—. Lo siento.

Algo en la forma en que lo dice me hace pensar que lo siente por algo más que presionarme, puede ser lástima por haberme involucrado en esto, tal vez lo siente por enamorarme de él, o lo siente por enamorarse de mí. O quizá lo lamenta por todo lo anterior a la vez.

—Yo también lo siento—digo y me libera del antebrazo, tomando mis dos manos.

Nos sentamos en silencio durante un rato.

Sé que debería levantarme y colgar la foto familiar encima del agujero en la pared, pero no lo hago. Mi piel me pica debido a la frialdad en el cuarto, el azulejo del baño me hace sentir aún más frío.

—Me preguntaba, ¿por qué elegiste ponerte de mal humor en la bañera?—le pregunto a Harry.

—Caminé a través de una pared al azar y me encontré con la bañera—responde.

Asiento con la cabeza, luchando contra una sonrisa.

Me mira, con sus pulgares moviéndose lentamente en la parte posterior de mis manos. La forma en que me mira es como ninguna otra, sus ojos color jade me recuerdan al color de la hierba en verano, suave en la piel cuando te tiras hacia atrás, enredándose entre tus dedos. Sus labios son de color rosa pálido, suaves y lisos como seda hilada por los dedos de dioses. Es tan hermoso, observándome. Me gustaría que no me abandonara.

Phantom [h.s] •Completa•Where stories live. Discover now