Razón N°7: Disculpas rápidas -Parte1-

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-No.-la voz firme del profesor de historia nos detuvo.-Ustedes, señoritas, estarán juntas y punto. Señor Weyland será su ayudante, coordinador o como quieran llamarlo.-finalizó.

Todo estaba en silencio.

Nadie iba en contra del profesor de historia.

-Ahora, siga con la lista señorita.-apuntó con su mano a la madre de la arpía, y se fue caminando lo mas calmado.

-Hijo de...-la mano de Luke tapó mi boca.

-No quieres hacerlo.-susurró en mi oreja, provocandome un escalofrío.-Créeme, ese tipo escucha todo lo que esta a 150 kilómetros a la redonda.-rodeé los ojos por su exageramiento, y quite su mano de mi boca.

-Aún sigo enojada contigo.-dije apuntándolo con mi dedo.

Me di vuelta, como la diva que no era, y fui caminando hacia la estúpida cabaña que compartiría con la estúpida arpía menor, y con el estúpido y sensual Whine, en el estúpido campamento pagado por alguien con la estúpida sangre Barren.

Si me encuentran colgada de un árbol, por lo menos permitanme ser comida por los osos.

Encima aún faltaba un cuarto compañero, el colmo sería que uno de los oxigenados jugadores de basquet este con nosotros.

Me detuve frente al caminito que hacían todas las cabañas, y comencé con mi sabia elección.

-De tin marín de do pingüe cucaramacara títere fue yo no fui fue tete pégale pégale que ella fue.-mi dedo se detuvo en una de las cabañas más horrendas.

-Uhg.-murmuré.-¿Quién soy yo para cuestionar una rima infantil?-me encogí de hombros, y caminé arrastrando mi gran maleta por el camino.

-Tienes que estar jodiéndome.-la voz de Luke me hizo girarme.

Detrás de él venia la arpía intentando caminar con los tacos de 8 cm que se había puesto, y detrás de ella iba uno de los drogones del curso quien llevaba unas 3 maletas encima, que supuse eran de la reina.

-Nop, elegí esta.-señale la casucha.

-¿QUÉEEEEE?-cerré los ojos, controlándome internamente para no golpear a un animal.

-Entra y cállate.-señale nuevamente la fea cabaña.

-En mis sueños.-chilló.

Aaaaaaag.

1, 2, 3, 4, 5, 6, 7...

-Mis lindos pies no tocaran ese piso.-suspiré profundamente.

-Lo harán por las buenas, o las malas.-enarcó una ceja y  me miro desafiante.

-¿Y quien lo dice?-ahora yo enarqué una ceja, y me acerqué a ella.

-¿Sabes quién lo dice?-me acerqué a un más, y vi a Luke de un movimiento rápido posicionarse detrás de mi por si pasaba algo.-Lo dice la idiota que te partió la cara, ahora entras o te pateare el trasero hasta verlo allí dentro.-gruñí.

Se dio vuelta, y llamó al chico, mientras pasaba a mi lado empujándome.

<Ten cuidado esta noche, Barren>

-¡YO QUIERO ABAJO!-gritó la arpía, y se oyó el ruido de muchas cosas caer por el piso.-¡Idiota!¡Mis perfumes!-Oh, pobre chico.

-Ana.-Luke tomó mi mano, y yo la quité rápidamente.

-Ay dios mio. Siento como si alguien me tocase.-miré (falsamente) a ambos lados con cara de terror.

-Anabeth.-dijo fastidiado.

10 Razones para NO Enamorarse (#10RPNE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora