(Corazón de Melón, Lysandro) Voy a amarte

Capítulo 2

—Yo... bueno lo que sucede...—Empecé a hablar con el pecho apretado, ¿Estará bien contarle todo a Castiel?, después de todo es el mejor amigo de Lysandro.

—Su, podemos hablar un momento. —La voz de Rosalya llego a nuestros oídos y miramos a su dirección. Ella entraba al aula con un semblante triste.

Contuve mi respiración y mire de reojo a Castiel que bufaba molesto. Él se levantó del asiento y miro a Rosa sin decir nada... ¡Santo cielo! Rosalya me ha salvado, estaba a punto de decirle todo y ella apareció justo a tiempo antes de que hablara. No es que fuera malo que supiera, solo que ahora no era el momento.

—Oh, están ocupados. —Dijo ella observándonos a los dos algo decepcionada.

—No, yo me voy. —Castiel tomó su mochila de un tirón y sin decir nada más salió del aula dejando el ambiente tenso, estaba enojado, eso era muy seguro. Pero ahora eso era el menor de mis problemas, estaba sola con Rosa y ya sentía las ganas de marcharme.

—Castiel se veía molesto, ¿De verdad no los interrumpí? —Preguntó ella preocupada por la reacción del pelirrojo.

Mire a mi alrededor y después mis ojos se posaron en Rosalya, de inmediato a mi mente se vino la imagen de Lysandro y ella unidos en un tierno abrazo. Desvié mi vista sintiéndome horrible y maldiciéndome por sentirme tan mal respecto a eso, ¡fue solo un abrazo!... aunque pensara aquello no podía no dejar de sentirme fatal.

—Castiel siempre anda molesto. —Respondí tomando mis cosas y guardándolas, la próxima clase era química y teníamos que cambiarnos de salón.

—Bueno, eso es cierto. —Dijo ella finalizando el asunto.

—Bien, me iré a la sala de química. —Dije de inmediato caminado por su lado pero ella me detuvo en ese mismo instante.

—Espera, tengo que hablar contigo, Su.

—¿No puede ser después Rosalya?, Ahora tenemos que...—Ella me interrumpió.

—A la clase de química, lo sé, yo igual tengo que ir y además estamos en el mismo equipo. —Me recordó la situación y sentí una bofetada invisible por haberme olvidado de aquello. Yo hacía equipo con Rosa en la siguiente clase... aunque quisiera escapar no podría lograrlo. Lo único que me reconfortaba es que la profesora no nos dejara hablar en la clase. —Mira, sino quieres hablar ahora lo entiendo, pero tenemos que hacerlo algún día y quiero que ese día sea hoy. Así que te esperare fuera de instituto al finalizar todas las clases.

—Rosa yo...

—No aceptare un no, y si te escapas... ¡Te juro que te iré a buscar a tu casa! —Me amenazó y salió del salón dejándome estupefacta, definitivamente no podría escapar más de ella, al menos me dejaba tranquila hasta finalizar las clases, y para ello aún quedaban un par de horas.

Las clases de química no fueron muy gratas, al estar sentada con Rosa sin decir nada más aparte de la materia, me hacía enfurecerme conmigo misma, era horrible estar así con ella, pero algo no me dejaba tratarla como antes. La maestra nos dio mucha tarea y un experimento en la clase que casi termina nuevamente con una explosión. Gracias al cielo Nathaniel pudo detener a su hermana para que no provocara otro desastre.

En el almuerzo estuve con Alexy y con Iris, fue agradable y me pude relajar al fin unos minutos en el día. Cuando el fin de las clases llegó, guarde mis cosas y observe como Rosa se adelantaba en salir. Resignada y cansada por la falta de sueño yo también salí del salón para ir a hablar con Rosalya adelante del instituto cuando una mano en mi hombro me detuvo. Al girarme los ojos de Castiel estaban sobre mí.