¿Una fiesta de Halloween desastrosa?

Único capítulo.

Era un día 30 de octubre, como mucha gente conocerá, ese día siempre era el día de Halloween, ese tipo de fiesta siempre había conseguido llamarle la atención a Sora, pero sobre todo querer celebrarlo y claro, celebrar algo así en una isla no era del todo divertido que digamos, es entonces cuando habló de ésto con sus amigos Donald y Goofy, les dijeron que ellos habían celebrado más de una ocasión aquella fiesta en el castillo del rey Mickey junto a los demás, Minnie, Daisy, etc.

—Oh, entonces podría ir con vosotros al castillo. —Dijo Sora.

Pero algo mucho mejor les propuso e incluso se podría decir que más sencillo y más cómodo, ¿por qué? pues viajarían todos hacia la famosa y conocida ciudad de Halloween, era pan comido, tan sólo deberían ir en una nave gumi mucho más grande y amplia y llegarían en un periquete y automáticamente tendrían unos trajes de Halloween increíbles, Sora sin duda amaba el suyo.

Como le pareció muy buena idea aceptó todos decidieron ir hacia allí, incluído Pluto. Una vez llegaron, fueron recorriendo la ciudad, y mirando con emoción y alegría los trajes que en ese momento llevaban.

—¡Sí! —Exclama Sora dando una vuelta completa mientras miraba su traje. —Sin duda, es perfecto.

—Me pregunto dónde estará Jack. —Dijo Donald. —De seguro todos están celebrando Halloween en ese momento.

—Échemos un vistazo a la plaza. —Responde Sora.

Y caminaron hacia allí, ¿quiénes fueron los demás visitantes además del trío que viajaba mundos sin parar? Mickey, Minnie, Daisy y perro de pelaje amarillo Pluto. Caminaron hacia la plaza y una vez llegaron vieron a muchísima gente allí, Jack que como era de esperar sí estaba allí y nada más verles fueron hacia ellos de inmediato.

—¡Hola, chicos! qué de tiempo sin veros. Wow, veo que habéis venido con compañía, encantado de conoceros, soy Jack Skeleton. ¿Habéis venido a celebrar Halloween con nosotros? ¡Eso es una gran alegría! De seguro, lo pasaremos genial, se van a realizar incluso un montón de juegos divertidos.

Todos escucharon atentamente lo que dijo Jack, vaya, por lo que acababa de comentar parecía que aquella fiesta sí iba a ser muy divertida y además entretenida, justo en ese momento, cuando todos estaban atentos a las palabras de Jack, Pluto comenzó a alejarse un poco de ellos, comenzando a caminar y a olfatear el suelo, es como si hubiese sentido algo, siguió caminando y olfateando hacia una esquina y... ¡un sincorazón! pero parecía ser de los menos peligrosos, ¿una sombra? ¿qué demonios hacían los sincorazón allí? Pluto rápidamente se dirigió hacia ellos y trató de llamarles la atención para que se dieran cuenta.

—¿Eh? ¿qué ocurre, Pluto? —Preguntó el rey Mickey.

—Bah, te dije que no era buena idea traerlo, majestad. —Dijo Donald. —No será importante, seguro que se ha asustado al ver a algún fantasma o algo relacionado, menos mal que nosotros estamos acostumbrados.

Pero Sora sospechaba algo, ¿qué sería aquello que ha visto Pluto? Aún así, esperó que realmente lo que dijo Donald fuese cierto y no algo de lo que hay que preocuparse realmente.

Los juegos comenzaron, básicamente estos juegos se basaban en aquellas fiestas, uno por ejemplo era de quién era o quién tenía el traje de Halloween más terrorífico, o más bien, uno muy común y que siempre se celebraba allí, "el más terrorífico del año", pero siempre acababa ganando Jack, eso a nadie le molestaba excepto a tres individuos, llamados Lock, Stock y Barrel, desde que ya no estaba Oogie Boogie siempre trataban de vengarse por así decirlo con algo, aunque fuera estropearles la fiesta y los juegos de Halloween, y éstos estaban escondidos en una esquina riendo con un tono malvado, ¿qué tramarían?

Unas horas después, realizando el juego del más terrorífico del año Jack subió a lo más alto de un escenario, una vez más quedó proclamado como el más terrorífico de toda la ciudad de Halloween, muchos desde abajo aplaudían y Sora y sus amigos hacían lo mismo, con unas grandes sonrisas en el rostro. Poco después, un sincorazón gigante estaba a punto de caer en aquel gran escenario donde Jack se encontraba.

—¡¿Pero qué demonios?! —Cuestiona Donald sin podérselo creer.

—¡¿Qué es esa cosa?! —Cuestiona esta vez Goofy.

Aquel sincorazón era sin duda el de la armadura donde Sora se enfrentó una vez en Ciudad de Paso, ¿pero qué demonios hacía ahí? No, espera, algo había detrás de todo esto. Jack, dio un salto y bajó hacia abajo antes de que esa cosa cayera y se le aplastara encima.

—¡Chicos! —Dijo Jack. —¡Eso no es un sincorazón de verdad! Fijaros bien, es un robot y fijaros también arriba de éste, lo están manejando nada más ni nada menos que...

—¡Lock, Stock y Barrel! —Exclamaron todos a la vez.

—Jejeje, venimos a deshacernos de toda esta pocilga. —Dijo Barrel.

—Eso, eso, lo lamentaréis, ¡esto por Oogie! ¡lo destrozaremos todo!

Sin más dilación, la gente de la plaza comenzó a asustarse y a salir corriendo, el alcalde de la ciudad no hacía más que andar de un lado para otro poniéndose muy nervioso.

—¡Que alguien detenga esa cosa! —Exclamó.

—¡Nosotros nos ocuparemos! —Dijo Sora sacando su llave espada.

Donald y Goofie también se pusieron firme, además del rey Mickey y del mismo Jack, comenzaron a batallar contra ese robot gigante en forma de sincorazón, Jack estaba muy enfadado pero también harto de aquellos tres individuos, parecía que ya no iban a volver a molestar más pero bajó la guardia, fue un ingenuo, nunca debió confiar en ellos, tenía que deshacerse de aquellos tres para siempre de una vez por todas.

Al cabo de unos minutos, aquel robot gigante acabó en el suelo completamente destrozado y Lock, Stock y Barrel se abrazaron entre ellos temblando como si de tres pollitos se tratasen.

—¡No nos hagáis nada, por favor! —Dijo Lock.

—¡No volveremos a hacerlo, lo prometemos! —Exclama asustada Stock.

—¿Os parece bien la que habéis montado? —Les cuestiona Jack muy enfadado. —¡Lo habéis destrozado todo! Y no sólo eso, habéis estropeado los juegos, aún no habíamos terminado, bien, ¿cómo pensáis pagar todos estos desperfectos? os las tendréis que ver con el alcalde la ciudad.

A pesar de lo sucedido, la cosa terminó bien, aquellos juegos se pudieron reanudar y acabar muy bien, como recompensa todos se llevaron un montón de caramelos y de golosinas por haber participado, fue una fiesta increíble, restando aquello tanto Sora como los demás se lo pasaron de maravilla y aquellos tres individuos fueron desterrados de la ciudad y llevados a un centro donde se trataría de educarlos mejor, así ya no volverían a molestar más.

Era la hora de regresar, se despidieron de Jack y de camino de regreso a la nave gumi Pluto miró atentamente a su alrededor, a lo lejos... ¿una sombra? vaya, pues parece que realmente los sincorazón sí acechaban nuevamente...