1.Frappé

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Seth dejó sus cosas al rincón de la cabina, tomando asiento a un lado de su mochila y acomodándose correctamente las gafas en el puente de la nariz.

La universidad solía ser un fastidio, pero venir a beber alguna bebida al café siempre le hacía continuar su día de una forma más animada.

Jugueteó con la pajilla, haciendo un sonidito cuando los hielos chocaban con el vaso de cristal.

El lugar era cálido, y el aroma volvería loco a cualquier adicto a los dulces que entrara. Tal vez por eso era uno de los más populares en toda la ciudad.

El muchacho de cabello bicolor revisaba la tarea que debía entregar para su clase de literatura, disponiéndose a beber un sorbo de bebida fría mientras lo hacía. O eso hasta que cierto peso cayó en la cabina del otro lado de la mesa, junto con un suspiro cansado y exasperado.

—Todo es una mierda.

—Sí, también es un gusto verte, Dean—.habló con sarcasmo Seth, moviendo el popote con una de sus manos y manteniendo su vista en el cuaderno frente a sí.

—No tienes idea de la mierda que he tenido que pasar, hermano—.comenzó a decir nuevamente aquel muchacho de cabello castaño desaliñado—Todas las mujeres son unas perras.

Dean Ambrose era su mejor amigo, y aunque no se parecían en casi nada, encontraban la forma de congeniar.

Dean la cagaba, y Seth lo arreglaba. Así era siempre.

Rollins pareció debatirse consigo mismo, pero consiguió levantar su mirada del cuaderno y prestarle atención a Dean.

– ¿Qué hiciste ahora, Ambrose?

– ¿¡Disculpa!? ¿¡Por qué crees que he hecho algo yo!?

Ambrose le observaba con su ceño ligeramente fruncido, al cual Seth solo le miró con sarcasmo en su rostro. 

—Porque te conozco—.su amigo refunfuñó de mala gana, volviendo a apegar su espalda contra el respaldo de la tribuna mientras sus brazos estaban cruzados—Anda, dime qué pasó.

El castaño de mirada azulada frunció sus labios, pero cuando estuvo a punto de hablar, las campanillas de la entrada resonaron con suavidad detrás de ellos.

—¡No me jodan! ¡Esto tiene que ser una maldita broma!—.exclamó con suma molestia cuando ambos voltearon en dirección a la puerta. 

Pero Seth no podía articular palabra, su cuerpo se había paralizado y su rostro mostraba una mueca sumamente estúpida. No era para menos, viendo a la hermosa chica que había llegado al café y se había puesto a hacer la fila para hacer su pedido. 

Su cabello oscuro caía por la piel al descubierto que dejaba su camiseta de tirantes, sus ojos parecían perfectamente dibujados con delineador, y dejaba a creces que era una chica confiada de sí misma. 

Era hermosa de los pies a la cabeza. 

—¡Rollins! ¡Rollins!—.Ambrose no dudó en golpear a su amigo en la mejilla, devolviéndolo de su trance después de un susurrado "auch"—Quítale los ojos de encima a esa perra, que es mi ex. 

Seth no pudo evitar abrir sus ojos con sorpresa frente a su mejor amigo, dándole otra mirada a la pelinegra antes de volver a concentrarse. 

—¿T-Tu ex?

Dean asintió de mala gana, agarrando el vaso de frappé y bebiendo un largo trago a través del popote. 

 —Rompió conmigo esta mañana—.murmuró todavía irritado, arrugando el labio con desprecio al posiblemente recordar—Dice que ya no es lo mismo que antes y blah, blah, blah. 

Pero el bicolor parecía perdido en su propio trance, sin poder evitar volver a tener sus ojos en aquella fémina que recibía sonriente su orden. 

Sabía que Ambrose tenía un montón de chicas siguiéndole, pero nunca conoció a ninguna...hasta ahora. 

—Como sea. Ella se lo pierde—.exclamó bruscamente el castaño, llamando la atención del muchacho de lentes justo a tiempo en que la pelinegra abandonaba el café—Solo no te metas con ella ¿de acuerdo? Es un completo desastre. 

Rollins no pudo evitar reír, al mismo tiempo en que le arrebataba el café a su amigo y se resignaba a disfrutar el poco que le había dejado. 

—No hay nadie más desastroso que tú, Dean...Y me debes otro café. 



Es un poco extraño, pero pensé en escribir en este block ya que terminé todos mis deberes. 

Dean siempre ha sido el chico malo desde que nos conocimos en cuarto grado, siendo yo la sombra y el tímido que se escondía de todo el mundo.  

Pero ¿es posible que exista alguien más desastroso que él? No lo creo posible de ninguna forma. 

Supongo que debería hacerle caso a Dean y olvidarme de ella...

Supongo.

Daily Coffee [Saige]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora