La CTRA (Centro De Tecnología De Robótica Avanzada) actualmente se encontraba en la investigación y realización de un nuevo proyecto, un androide con forma de un humano (humanoide) con pensamiento y sentimiento, a petición del millonario Antonio Mat...
Me levanté más temprano de lo normal hoy haría algo especial para Abraham, es cierto que los detalles es común que los chicos los den pero yo quería romper con los estigmas sociales. Tomé una pluma y escribí algo sobre un papel lo puse en un sobre y lo metí a mi bolsillo, salí a la calle y tomé el primer taxi que ví y abordé en el iba mirando el paisaje por la ventana y ví una florería le pedí al señor del taxi que esperara un momento, me bajé y compré una rosa azul:
-Su color preferido- pensé
Me subí de nuevo al taxi y llegamos a la universidad a las 7:30 pagué y me baje de este, aún no había nadie así que podría darle la sorpresa, me dirijí a su casillero y lo abrí si sabía su combinación. Metí la tarjeta adentro junto con la rosa azul dentro de el casillero lo cerré y suspire:
—Espero que te guste mi amor—Pensé
Me fui a mi salón a esperar que las clases comenzaran...
Narra Abraham:
Hoy se me hizo tremendamente tarde me levanté justamente a las 7:30 tenía solo 20 minutos para arreglarme:
—Vaya mateo dijiste arreglarte— Pensé y me reí de mi mismo
tomé lo primero que vi y opté por:
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Me peiné un poco el cabello y salí casi corriendo de la casa, me subí a mi Camaro y lo puse en marcha rumbo a la universidad, afortunadamente llegué temprano no recordaba que no tenía la primera clase de hoy:
—Idiota—pensé riéndome de mi mismo
Me bajé tranquilamente del auto y fui rumbo a mi casillero, lo abrí y dentro de este había una rosa azul y una nota al parecer. La saque del sobre y decía:
"Nunca dejes de sonreír, no le prives al mundo de ver esa hermosa sonrisa"
Atte: La chica del beso
Casi por reflejo inmediato la nota me sacó una sonrisa, de nuevo la chica del beso sonreí para mis adentros besé la nota con cariño y la metí a mi bolsillo llevando la rosa entre mis dedos. Me sentía especial alguien se había acordado de mi y ella la chica del beso estaba distante de tantos problemas. De verdad me había alegrado el día, quizá solo quizá esa chica me atraía.
Llegué al salón con la rosa en mi mano derecha, era preciosa y no dejaba de mirarla era lo más especial que alguien me había regalado y quería conservarla por siempre, saqué mi libro favorito de mi mochila titulado "El principito" Tomé la rosa y empecé a romper sus pétalos colocandolos dentro del libro así se quedarían conmigo por siempre.
Las clases se me pasaron volando pensando en la chica misteriosa, y por alguna razón confiaba en ella y sabía que volvería. Sonó la campana de salida pero yo me quedé en el salón inmovil, saqué un papel de mi mochila y escribí sobre el algo para ella, sabía que volvería a abrir mi casillero, tomé mi mochila y me dirijí a este lo abrí y dejé algunos libros junto con la nota para ella. Lo cerré y me fui a casa suspirando como un tonto enamorado.
Llegué a casa y ahí estaba mi padre:
—Hola hijo—Me dijo sonriente
—Hola papá—Le contesté riendo
—Hey se nota que estas contento hoy—Dijo confundido
—Sí papá, lo estoy—Contesté casi volando en nubes y suspirando
—¿Enamorado eh?—Me dijo con cara de pícaro
—No papá como crees—Mentí
—Emm me tengo que ir a hacer tarea adiós papá—Dije subiendo las escaleras corriendo
Llegué ami habitación, me sentía tan bien por un día me sentí normal como un chico cualquiera....
