Capítulo 10.

2.2K 183 77
                                    

- ¡Te dije que girases a la derecha! –insistió Sam.

- ¡No lo hiciste! –replicó Dean.

- ¡Qué sí!

- Qué no –Dean me miró por el espejo retrovisor- A que no lo dijo, Alli.

- A mí dejadme en paz, yo estaba durmiendo.

Los chicos llevaban media hora discutiendo sobre si Sam le dijo a Dean que doblase a la derecha en una bifurcación, la cual nos está llevando por una carretera desconocida sin carteles por girar a la izquierda. Miré por la ventanilla el paisaje de prado que se extendía hasta el horizonte, suspiré rendida.

- ¡Todo sería más fácil si comprases un puto GPS!

- ¡No le voy a poner esa cosa a mi nena!

Sam resopló enfurecido y yo reprimí mi impulso de gritarles a ambos que se callasen. Tras un rato más discutiendo como idiotas, se callaron. Dean se negó a la idea de dar media vuelta, es decir, que decidió seguir el camino desconocido, una terrible idea en mi opinión.

Tras una hora más en carretera, empezamos a ver una ciudad.

- Por fin –dije- Civilización.

Dean nos llevó a través de la ciudad hasta un motel. Al parecer pasaremos la noche aquí. Entré en mi habitación y dejé todas mis cosas en el suelo, me tumbé en la cama y cerré los ojos, dormir en el asiento trasero del impala no es mi prototipo de comodidad, por desgracia.

****

Ya era de noche, el resto de la tarde me la había pasado dentro de la habitación del motel viendo la tele y jugando con el móvil que ahora mismo tenía cargando.

- ... Urbanización Puesta de Sol, las mejores casas al mejor precio...

Apagué la televisión, cada día odio más los anuncios. Me recosté en la cama, puse mis brazos detrás de mi cabeza y me quedé así un rato hasta que mi móvil empezó a sonar, lo cogí sin prisas.

- ¿Sí?

- ¿Allison?

- ¿Megan?

- Hola, Allison. Me aburría en casa y pensé si te apetecería venir conmigo a la discoteca.

- Lo veo algo difícil, estoy en otro estado.

- ¿Qué?

- Me fui de viaje con unos amigos.

- Oh, ¿y qué tal?

- Bastante bien, es un viaje bastante interesante.

- Me alegro. Pues ya quedaremos otro día cuando vuelvas.

- Vale, chao.

- Adiós.

Volví a dejar el móvil encima de la mesilla y cerré los ojos. Unos portazos a mi puerta me alarmaron, espero que sea importante, me levanté y abrí, Dean estaba apoyado en el marco de la puerta.

- ¿Pasa algo?

- Sam y yo íbamos a ir a cenar, ¿vienes?

- Claro, dame dos minutos para ponerme algo decente.

- Yo creo que así vas muy bien –me guiñó un ojo.

- Te agradezco el piropo.

- ¿Quieres que te ayude a cambiarte?

Dean metió un pie dentro de mi habitación, pero le paré ahí.

- Me halagas, Dean Winchester, pero voy a tener que declinar tu oferta con un portazo.

Mi Mejor Error (Dean Winchester)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora