-Anto- era Syd, me miró y sonrió.

-¡Te dije que me esperaras!- salió Anto empujándolo.

-Con una novia así para que mascota- bromeó Kean.

-Tú estás ardido porque no tienes- rió Leon.

-¿Y por qué? ¿Nadie te hace caso?- pregunté.

-Kean está loco por la prosti de Ginny.

-¿Ginny? ¿La amiga de Berlín?

-Así es...la pobre tiene un disque secreto que todos ya sabemos- dijo Leon.

-¿Qué secreto? ¡Hablen ya, hijos de cualquier polvo!

-Ginny se prostituye- susurró Leon.

-¡Eso no es cierto!- reclamó Kean.

-¡Claro que si!- respondió Adam- Sus padres creen que le dieron un beca completa, cuando la realidad de las cosas es que paga la mitad de sus estudios con su trabajo nocturno- ¡¡Notición!!

-No me digan- di una carcajada. Sonó el timbre, salimos del baño de mujeres. Me fui con Leon a la primera clase ¡Iba a ver a mi hermano, por fin!

-Oye Jane, me preguntaba si...bueno, mañana es 14 de febrero- me tomó la mano- ¿Quieres salir conmigo?

-Y con Kean, Adam, Edward y Danielle ¡Claro!- entré al salón soltando su mano. Lo primero que busqué al entrar fue el rostro de mi gemelo. Cuando Edward me vio su cara se amplió tanto como la mía.

-¡Jane!- sonrió.

-¡¡Ed!!- me lancé a sus brazos. Me senté a la par suya y recibí la clase más dormida que despierta. Pasó el día de lo más aburrida, miré a Danielle en la tercera clase y a la hora del almuerzo todos comentaron lo del gas mostaza del día anterior. Habían pocos estudiantes, muchos habían tenido una reacción alérgica al gas. Llegó la hora de salida, yo me fui a la oficina de 'director'.

-¡Sasha!- me tiré en su silla.

-Hola, Jane- puso un café en el escritorio. Recibí una llamada; Liam.

-¿Hola?

-Jane ¿Podemos hablar?

-¿Dónde estás?

-En el pasillo de biología.

-Ok, ya voy- colgué. Tomé el café hirviendo de Sasha y salí al pasillo.

-¿Cómo estás?- me miró apenado.

-Bien, mejor que nunca ¿Qué quieres?

-Jane, perdón por como te respondí el día que me llamaste, estaba molesto.

-No me interesa. Adiós- di media vuelta, él me detuvo.

-Por favor, espera...Quiero que regreses conmigo.

-¿Qué?- di una carcajada- Nunca.

-Por favor, dime que tengo que hacer ¿Arrodillarme? ¿Lamer el suelo del piso? Sólo dime...-se arrodilló.

-No, levántate- él sonrió y se levantó- Toma- le extendí el café.

-Gracias- lo tomó.

-No, no es para que te lo tomes...Quiero que lo viertas...dentro de tus pantalones- sonreí.

-¡Que! ¡Estás loca! Me va a quemar.

-¡Es el punto! Pasé sufriendo este fin de semana sin tí y tú crees que vas a regresar así por así, no. Viértelo, ahora- ordené.

-No lo haré- di media vuelta, él me detuvo- Jane, sé consciente, te necesito, pero esto....

-O lo haces ahora o será peor más tarde...Dime lo tomas o lo dejas...- Liam desabrochó su cierre y extendió el elástico de sus bóxer, yo sonreí.

Mala Jane.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora