cap-XIII

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CAPITULO  TRECE

Saeng fue el primero que lo oyó,  no quería separarse de ella, era la primera vez que la tenía en sus brazos y no la quería soltar tan pronto.

El sonido era persistente, Jenny no tuvo más remedio que separarse de él y contestar la llamada sin ganas de hacerlo, ¡por una vez que podía disfrutar de su compañía y la tenían que llamar en ese preciso momento!.

 -¿Si?, !queee!... ahora vamos…… estoy con Saeng…… dame la dirección….de acuerdo vamos para allá.- colgué guardándome el móvil en el bolsillo de los vaqueros

   -¿Quién era? Preguntó con curiosidad  Saeng .

--Viko, necesitan ayuda, por lo visto les han pinchado las ruedas, están cerca del parque San Miguel. Han llamado a una grúa pero les han dicho que tardaran un poco en llegar y Viko no quiere regresar muy tarde  a su casa, me ha pedido que si la podemos llevar—no pude sostenerle la mirada, me daba un poco de vergüenza  después de lo ocurrido entre nosotros.

 -OK, vamos  entonces.

 ME cogió de la mano con naturalidad  saliendo del parque, el camino de vuelta lo hicimos en silencio, estábamos tensos, podía sentir  el calor que desprendía su mano contra la mía, me gustaba esa sensación en mi piel, él no me miró una sola vez mientras caminamos yo si embargo lo miraba de reojo constantemente, me mordí el labio toda nerviosa, no sabía como romper el silencio.

 El coche de Saeng  estaba cerca de la sala de juegos, lo divisamos al dar la vuelta del edificio, Saeng con su mano libre  buscó las llaves en el bolsillo delantero de sus vaqueros, me ayudó a subirme a él abriéndome la puerta. Él dio la vuelta por  delante del vehículo  para sentarse frente al volante, se giró mirándome en silencio, me ponía muy nerviosa cuando me miraba intensamente sin decirme nada, hizo que me ruborizara por lo que aparté la mirada centrándola en mis manos entrelazadas.

 Saeng estaba inquieto, quería cogerla de la mano pero no se atrevía, todavía no podía creer lo que había sucedido momentos antes en  el parque, nada de lo que pasó fue planeado, la intención solo era de hablar con ella, aclarar algunas cosas entre ellos para hacer menos complicada la situación, después de todo se tenían que ver dos veces por semana en la casa de ella. Ya casi habían llegado a donde estaba el coche estacionado de Hyung Jun. El coche giró a la izquierda, llegando al parque de San Miguel, aquello estaba lleno de vehículos, se veía  gente por todas partes

 “¿Cómo se le ocurrió a Hyung llevarla en su primera cita a un sitio como este?”  No podía creer el poco tacto que tenia su hyung con las chicas, yo hubiese elegido un lugar más tranquilo para poder conversar, conocernos el uno a otro sin la necesidad de que te empujaran o recibieses un pisotón arruinando el momento con ella, la verdad es que baby no tenía mucho tacto con las chicas que le gustaban.

 Divisé el deportivo de baby , aparqué justo detrás del suyo, me bajé y fui a ayudar a Jenny, ella por su cuenta ya se había bajado e iba donde estaba  Viko y baby sin darle la oportunidad de ser caballeroso con ella.

 -¿Que pasó?—pregunté al ver  las llantas destrozadas del coche.

 --No se, la verdad, no nos dimos cuenta hasta que puse el coche en marcha.

 Viko miró a baby, no  deseaba dejarle, ya eran las dos y media de la madrugada, sorprendiéndose de la hora al mirar el reloj.

Se le había echo muy corta la noche  y la verdad, es que no se quería ir dejándolo así, fue  una noche maravillosa junto a él, no la olvidaría tan fácilmente,

ENAMORADA DE TÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora