《¿Cuando fue que me enamore?》

Segunda Parte

¿Cuándo fue que mi vida cambio?

Se volvieron amigos.
Alejandro y Guillermo le enseñaban al inexperto de Rubén todo lo que sabían, le explicaban como elegir a una víctima y lo que tenía que hacer antes de atacar. Él estaba emocionado.

La madre de Alejandro trabajaba de camarera en el motel donde Rubén se hospedada, a ella le rentaban un apartamento de mala calidad cerca de su trabajo y su hijo le ayudaba a pagarlo. Cuando el ojiverde miel les contó su situación, Guillermo le propuso rentar juntos un apartamento en el mismo edificio donde estaba Alejandro. Aceptó en seguida.

Se sentía como cuando era niño e iba entusiasmado los primeros días a su escuela, aprendiendo las técnicas para obtener lo que deseara.

--Escoge bien a tu víctima-- le advirtió Guillermo una tarde, cuando los tres comían helados en una plaza  --, debe de tener un alto rango.

--Así es, entre más dinero tenga, mejor.-- Alejandro le recomendó a su nuevo amigo.

Rubén anotaba todo lo que los chicos le decían en su mente, sin despegar la vista de ellos.

--Luego, debes investigar sobre esa persona-- habló Guillermo llamando nuevamente su atención --. No se te debe escapar ni un solo detalle, tienes que saber todo.

--¿Cómo?-- Rubén interrogó curioso.

--Persigue a tu presa, observa su entorno, pregunta por él con discreción y conviértete en una coincidencia.-- el de baja estatura aportó.

--Una maravillosa y caliente coincidencia.-- los amigo rieron cuando el chico inexperto añadió aquello, poco a poco aprendía más.

--Así es Rubén, deberás poner su mundo de cabeza-- empezó a hablar ahora el de ojos achinados --, que pierda la cordura con tu sola presencia y que abandone todo, solo por estar a tu lado.

Rubén asintió analizando las palabras, suspiró y agachó la mirada antes de hablar --No sé si yo pueda hacer eso, es complicado.

--Lo harás-- le apoyó Alejandro --, solo es necesaria mucha paciencia y dedicación.

Solo unos consejos más y con ayuda de ellos, eligieron a la primera presa del rubio-castaño. Algo sencillo para comenzar, un joven empresario que empezaba a trabajar en la cadena famosa de restaurantes de su padre como contador. Un tal Frank Garnes de 21 años.

Con ayuda de sus nuevos amigos investigó sobre él. Su fecha de cumpleaños, gustos, preferencia sexual, lo que no soportaba, familia, entre otras cosas. En menos de un par de semanas ya sabía lo más importante, era homosexual y estaba soltero. Ahora debían convertir a Rubén en su pareja ideal.

Se conocieron "accidentalmente" cuando Frank salía de trabajar. Un inocente chico y algo tímido se le acercó a él preguntando donde estaba, se había perdido. El chico caballeroso le dio instrucciones de como llegar a la calle donde quería ir el desconocido. Este le agradeció con una dulce sonrisa y con una abrazo, llamando la atención del contador.

Frank se dio la libertad de examinar al chico, alto, delgado, sonriente y aparentemente cariñoso y afectivo. No pudo evitar sonreírle coqueto.

--¿Quieres que te lleve a tu casa?-- se ofreció amable, el chico perdido le miro con inseguridad y terminó aceptando --¿Cuál es tu nombre?