Devil's daughter: Los Pactos

~Capítulo 4~

Un recuerdo de mis padres y mi hermana antes de morir vuelve a mi mente y ese hombre de los ojos verdes mirándome, me hace una señal para que le siga, yo lo hago.

Me alejo de todo aquello que quiero y entro en un lugar oscuro, húmedo...

Nuestros labios se separan.

Estoy roja enfrente de el mirándole con indignación.

-¿Porqué has hecho eso?-Le digo casi a gritos.

-No lo se, me apetecía... Es que... Breen debo decirte que..

-Déjame en paz, ¿tienes idea de los problemas que podría tener si alguien se enterase?

-Lo siento Breen..

-Olvídame-Me voy y pego un portazo.

En definitiva, es un imbécil. Un niño malcriado que cree que puede hacer lo que le de la gana y cuando le de la gana...

Pero conmigo eso no funciona.
A medida que me voy alejando de la puerta siento otra vez un dolor intenso proveniente de mi marca.

No entiendo el porque cuando me acerco a ese muchacho deja de dolerme.

¿Porqué al besarnos recordé todo aquéllo?

¿Quién es este chico?

Sus ojos me recuerdan a....

Otra vez esos ojos se posan en mi bajo
la oscuridad, susurrando
"Breen, solo quiero ayudarte",
"Por favor, Breen ven con migo"

Esta mañana en clase de economía Jonh se sentó a mi lado y me dijo que tenía que hablar conmigo.

Como era de esperar pasé de el, y a la salída de clase me escapé antes de que el se diese cuenta.

Pero me alcanzó.

-Breen, deja de evitarme- Dice entre jadeos- Ambos sabemos que tenemos que hablar.

-¡Déjame en paz!- Le grito enfadada.

-¿Porque eres tan borde con migo?- se ríe disimuladamente.

-¿Porque me besas sin mi permiso?

En ese momento me siento estúpida, pero a la vez me doy cuenta que realmente lo que me molestó de el no fue eso, sino ese efecto que siempre tiene en mi, y la sensación de tranquilidad que me provoca estar a su lado.

-¿!Breen!?- Me grita con impaciencia moviendo su mano delante de mi cara de arriba a abajo.

-¿¡Qué!?

-Preciosa, si te dispersas cada vez que te hablo...

-¿¿¡¡Preciosa!!??-Lo miro enfadada mientras me voy poniendo roja por el enfado.

Me mira con ironía y suelta una gran carcajada.

-Bueno, como te iba diciendo antes, debo contarte algo sobre...

-No quiero saber nada de ti además, no creo que me pueda interesar algo que tu me digas, ¡Déjame en paz de una vez!

-Breen...- Me mira con pena.

Me doy la vuelta para irme, segundos después giro la cabeza para verlo una ultima vez y Jonh ya no estaba allí.