Capítulo 2: El campamento.

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~ 11 Años después..... 

En el campamento ''Walden'', se encontraban varias chicas en autobuses llegando a su destino,  cuándo ya lo habían hecho, se pararon en la entrada del campamento. Varias chicas salieron con equipajes de los autobuses. Empezaron a caminar.

- Bienvenidas niñas al campamento Walden, yo soy Marta, la directora del campamento, ahora vayamos por nuestras mochilas lo más pronto que podamos, porque tendrán un día lleno de actividades, mi mano derecha Marta Junior de las asignaciones de la cabañas. - Dijo una mujer de mediana edad con un altavoz. Y una mujer se puso al lado de ella, al rededor de ellas había muchas niñas.

- ¡Estupendo!, Encontré mi maleta. - Dijo una platinada saliendo de su escondite, iba a agarrar su maleta pero otros pusieron su equipaje encima de la maleta de ella. - Ahora la cosa es... sacarla de este desastre. - Dijo caminando en círculos y sacándose los lentes de sol. - Bueno, agh... sal de ahí. - Dijo haciendo esfuerzo de sacar su maleta de allí.

- Tú eres nueva. - Dijo una chica acercándose a ella.

- ¿Se nota?. - Preguntó la platinada.

- ¿Porque no tomaste tú bolso antes de que los niños aventarán más al montón?. - Preguntó la chica y se puso enfrente de ella. - Necesitas urgentemente ayuda. 

- Gracias, es una amarilla grande. - Respondió sonriendo, y empezaron a intentar de sacarlo de allí. - Wow, así será una gran mujer. - Dijo ella cruzándose de brazos, viendo cómo una agarró su bolso fácil. 

- ¡HEY LA DE LA FUERZA BRUTA!. - Gritó la chica y ella se dio la vuelta y se acercó a ellas.

- ¿Podrías ayudarme con mi maleta?. Es una amarilla que está desespultada en algún lugar de aquí. - Dijo la peliblanca.

- Claro... - Respondió la chica. - Ah, ¿es esa?, No hay problema. - Dijo y agarró la maleta y vio la etiqueta de su maleta. - Oye, ¿eres de California?. - Preguntó dándole su maleta. Ella asintió. - ¡¿Vives en Hollywood?!, ¡¿Vives al lado de una estrella de cine?!.

- ¿Y ustedes que?, ¿Las trajeron del cerro?. - Preguntó ella. - Jamás he visitado Hollywood, soy de Napa, al norte de California. Y vivo al lado de un viñedo.

- ¿Que cosa?. - Preguntó la chica de la blusa de colores.

- Un viñedo, es un lugar dónde se cosecha uvas, y vino, eso hacemos. Mi papá y yo tenemos uno. - Respondió.

- Frost Elisa. - Dijo una castaña por altavoz.

- ¡Aquí!. - Exclamó.

- Al aparajo. - Dijo la castaña.

- Hey, también estoy yo. - Dijeron sus nuevas amigas.

- Vámonos. - Dijo la niña yéndose con sus amigas. - Oigan, por casualidad, ¿alguna vez jugaron al jokey?. 

- Noo.. - Respondieron ellas.

- ¿No?, Ay pues... que lástima. - Dijo ella, y detrás de ellas sonó una vocina de un auto.

Un hombre castaño vestido elegante, bajaba de ese auto, y abrió la puerta de atrás. De allí bajo una peliblanca con algunos de sus equipajes en sus manos.

- Llegamos. - Dijo el castaño viendo el campamento. - El campamento Walden para niñas. Así que, ¿viajamos desde Londres para esto?. - Preguntó él caminando con la niña.

- Pero no es pintoresco. - Respondió ella. - Cómo parece.

- No, ese no es el termino que utilizaría. - Dijo él. - Revisamos la lista de tú madre. - Dijo sacando de su saco un pequeño cuaderno, y la niña asintió. - Bien veamos, ¿vitaminas?. 

- Si las traje. - Respondió.

- ¿Minerales?.

- También.

- ¿Lista diaria de frutas y vegetales?.

- Todo en orden. Una de frutas y otra de vegetales, continúa.

- ¿Bloqueador?, ¿Refelente de insectos?, ¿Sobres?, ¿Estampillas?, ¿Fotografías de tú madre, abuelo, y por supuesto de tú mayordomo servidor?. 

- Creo que tengo todo. - Dijo sonriendo.

- Ah, un pequeño detalle que me dio tú abuelo, un pequeño paquete de Naipes nuevos. - Dijo sacando una cajita. - Tal vez en este continente haya alguien inteligente quién te pueda vencer.

- Pues, no sé, lo dudó, gracias. Y gracias por traerme. - Se abrazan.

- No lo olvides, si cambias de parecer y quieres que venga por ti al terminar el campamento, tan sólo bastará una llamada. - Dijo él y se separaron del abrazo.

- Gracias, pero estaré bien, no te encojes, nos veremos en ocho semanas querido amigo. - Dijo ella.

- Ya te hecho de menos. Reina de mi corazón. - Dijo y empezaron a hacer un saludo.

Besa su frente. - Diviértete mucho. - Dijo él yéndose al auto.

- Lo haré. - Respondió. 

- Adiós. - Dijo él.

- Chao. - Dijo ella divertida. 

- Al aeropuerto. - Dijo él al chófer. Y el chófer arrancó el auto y se fueron de allí.

~ En el almuerzo. 

Todas y todos se fueron a la cafetería del campamento, algunas niñas jugando, otras hablando, o otras comiendo. 

- Disculpen niñas, tengo que probar estas deliciosas fresas. - Dijo la directora del campamento, interrumpiendo que dos niñas se pusieran al lado. - ¿Te sirvo un poco?. - Le preguntó una de ellas, mientras se servía las fresas.

- Am... no, no, gracias pero... me da alergia. - Dijo yéndose.

- Oye, ¿a vos te gustan las fresas?. - Preguntó la directora a la peliblanca.

- Am, no, no es que me gusten pero, soy muy alérgica. - Dijo y tomó su bandeja con su comida y se iba a ir al igual que la otra, pero la mujer la detuvo.

- Alérgica, pero si ya me lo había dicho... - Dijo señalando a su lado y vio que no había nadie. - Oh, bueno, cómo es el primer día, tienes que entender a la vieja olvidadiza, al menos no puse sal a la azucarera... - la niña se va. - Y ahora, ¿dónde se fue?.

~ Minutos después...

~ En el patio.

Continuará...

Holis! Sé que he tardado mucho en actualizar pero... aquí esta su segundo capítulo, bueno. Tal vez enseguida actualice Entrenando a Papá, xd tal vez, jejeje. Oigan, ¿no odian que Wattpad cambie a cada minuto?. Okno. Pero a mi si xd. La razón les diré porque no he podido actualizar es que... estuve enferma y ahora estoy algo mejor no se preocupen ^ - ^.

Ojala les haya gustado el capítulo, cuídense, los/as quiero un montón, nos leemos luego. 
Chao, chaoo!!


~ Juego de Gemelas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora