SI TU MUNDO SE DESMORONA VEN AL MIO.

Karma

Se me hicieron las 10:00pm imaginando mundos dentro de mi mente y mis tripas rugieron de desesperadamente, decidí ir a casa a comer alguna cosa.

-hola abuela
-hola cariño, que tal el instituto?
-Muy bien. ¿Que hay para comer?- dije con cara de no aver comido en siglos-.
-Pescado a la planxa
-Okay, ire a comerlo a la habitación tengo que estudiar.
-vale no te acuestes muy tarde, buenas noches-me dió un beso y se fué.
Subí las escaleras hacia mi refugio, me tumbé en la cama y me puse música.
Stitches sonaba fuertemente en mis oidos.
Me encantaba escuchar música, me ayudaba a desconectar del mundo que nos rodea y me ayudaba a reflexionar sobre las diminutas cosas que hacia y sus consequencias, lo podemos decir Karma.
Mire hacia la ventana, ya mojada por las pequeñas gotas de lluvia.
Resegi con mi dedo una de ellas de pricipio a fin, entontonces comence a pensar en mi fin, en nuestro fin, ¿que seria de mi?, mejor dicho que seria despues de esto, de esta vida. ¿Podria aver una vida después, o nada mas quedaba las cenicias y los recuerdos de el ser humano por el paso tierra, o ni siquiera eso. A mi la muerte no me causaba miedo mas bien me causaba curiosidad incluso una chispa de gracia. Esa era yo, una chica, mirando el cristal empapado y pensando en la muerte en lo divertido del lado oscuro, era rara, pero mi rareza me gustaba, me gustaba ser diferente, amaba mi oscuridad.