Bueno, acabo de darme cuenta que el capitulo 4 no está, cuando sí lo había escrito e incluso publicado. Odio wattpad ¿Saben? trataré de recordar todo lo del 4 pero fue como en nov del año pasado (ni que fuera de en éste año) Y bueno, una disculpa por hacerlas esperar (?)
Gracias por leer ♡
Baje a la primera planta en busca de comida, no se cómo podía comer en un momento así pero ¿Que vamos a hacer? mi estomago me lo pide.
Buscando y buscando encontré galletas con chispas de chocolate. Galletitas, las mejores.
Seguro eran de mi madre, pero no le tomé importancia. Que luego se compre más y sí, vivo con mi madre. Tampoco es que sea niña mimada.
Solté un gruñido y deje el paquete de galletas en la mesa que se encontraba en la cocina, ya que alguien golpeaba la puerta seguido del irritante sonido del timbre. No estaba bien como para tener visitas o aguantar a otra persona en este momento. A paso lento camine a la puerta y la abrí apoyándome en esta.
Frente a ésta se encontraba Ronnie, quién al verme se tiró a mi para abrazarme, literalmente se tiró.
Rodeo mi cuerpo con sus brazos, correspondi a este poniendo mis brazos alrededor de su cuello. Sentí como su respiración se aceleraba, seguido de unos sollozos.
Estaba llorando. Ronnie Radke llorando, wow.
Me separe unos centímetros de él con el propósito de mirarlo, pero éste tenía su cara en el hueco de mi cuello y creo que por ahora no quería quitarse de allí.
Empuje con mis manos sus hombros, no quería que me soltará pero si quería mirarlo.
Al lograr mi propósito tome su cara entre mis manos. Sus ojos brillaban a causa del agua salada en estos. Le sonreí mientras que con mis manos quitaba las pequeñas porciones de agua bajo sus ojos. Él me devolvió la sonrisa.
-Pensé lo peor al recibir esa llamada tuya.-Conectó sus ojos con los míos, esos que pueden ser de un color muy común para otros pero no para mi.
Siempre me gustó mirar sus ojos, me trasmiten amor y confianza.
-No quiero perderte. -Su voz sonaba ronca.- No quiero perderlas. -Murmuró acariciando mi panza. Sentía mi corazón latir con fuerza, eso realmente tocó mi corazón.
-Nunca me perderás, Ronnie.- Le aclaré, y es que es verdad. Él nunca me perderá.
Acerque mi rostro al suyo y roce nuestros labios, sabía que a Ronnie le gustaba que hiciera eso, a mi también me gusta.
Ronnie tomó sus labios con los suyos fundiendonos en un beso. Realmente lo necesitaba a mi lado.
Me gustaba cuando Ronnie venía a casa sólo para acompañarme, ya sea viendo películas, charlando o solo para darme mimos.
