Capitulo 01

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Me llamo Emma, tengo 21 años.
Vivo con mi hermano que tiene 22 años, y su nombre es James.
¿Mis padres?... creo que con el tiempo van a saberlo.

Acabamos de llegar
eran las 10 am, nos levantamos a las 6:00 AM, demasiado temprano para James ya que tiene cara de zombi.

Hemos trabajamos mucho para pagarnos esos pasajes; desvelos, accidentes (por mi parte) y despedidas (de trabajo) por parte de James. Nos pasó de todo, pero al final llegamos y cumplimos nuestro sueño.

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Baje del taxi que nos acaba de traer a nuestra nueva casa, James traía las maletas y yo una caja con nuestros adornos de habitación de cada uno.

-Lo hemos logrado, Mía -dijo James con los ojos cristalizados, no me aguante y deje las cosas en el piso y me abalancé a él, me recibió con una sonrisa.

-lo sé !!!-dije súper contenta

-Te quiero mucho Mía - dijo besando mi frente y secándome las lágrimas yo igual lo hice con él y le sonreí.

-yo también idiota y soy Emma no mía-dije dándole en su cabeza, el solo todos los ojos cuando dije eso.
James desde que éramos unos niños nunca me dijo por mi nombre, ya que según él nunca le gustó y era "largo "para el decirlo, y de ahí me empezó a llamarme Mía.

-¡¡¡Elijo la habitación más grande!!! - dijo corriendo hacia las escaleras como un niño y tropezándose con las maletas
, me reí y lo perseguí escaleras arriba, lo encontré abriendo la puerta de baño.

-Creo que esa será tu habitación -dije riendo el gruño y cerró con fuerza me reí más fuerte, logrando que él también lo hiciera.

Vi una puerta al final del pasillo de la parte principal me apresuré abrir y me encontré con una habitación gigante tres veces más que la mía, hay una cama King en el centro paredes blancas, y muebles negros, había una ventana grande que daba Hacía la calle y se veía todas las demás casas, grité de emoción.

- ¡James!, ¡Ya encontré la mía! -grité lo más fuerte que pude James en segundos apareció en mi habitación bufo.

-Mierda, mía está era la que yo quería-dijo haciendo puchero.

-Bueno la gané yo, así que te jodes-dije acercándome a la cama sonriendo

-Está bien- dijo entre dientes reí y lo miré

-Quieres que te ayude con tus cosas?

-No, tranquilo yo puedo sola.

-Bien, acabó de llamar para lo de la mudanza y llegan en la tarde como a las 6 -dijo mirando su teléfono asentí.

-Qué bueno, así nos dará tiempo para acomodar la casa.

-si lo que tú digas-dijo riendo y saliendo de mi habitación.

Abrí mi ventana y me senté en ella colgando los pies para afuera. La casa es de dos pisos, así que esta alta, tiene un pequeño jardín en la entrada y un gran árbol a la izquierda.

Al frente de mi casa pude ver a los lados de la casa a niños jugando y cayéndose sonreí y puse mi mirada en la casa de al frente pude ver a un chico sentado en las gradas de su casa con la cabeza gacha me le quedé viendo.

MI BOXEADOR (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora