Como te digo que amo a tu hermano

8.No le digas nada

Justo ahí, en la puerta del cuarto de Henry, me di cuenta de que el plan salió
a la perfección.

La sonrisa no se iba de mi rostro, era tan grande que llegaba de oreja a oreja.

En ese momento llegó Gaby, escuche que la puerta de entrada se abrió y cerró rápidamente.

Entonces corrí a su cuarto y finjí que estaba sentada en su cama cantando algo, creó que me veía un poco rara pero que más da.

Subió las gradas y ni siquiera se detuvo a regresar a ver su cuarto, inmediatamente entró a la habitación de Henry, y lo abrazó muy fuerte.

Parecía como si no lo hubiera visto en años.

Decían algo, pero el sonido se distorsionaba y no se escuchaba bien donde yo estaba.

Sólo cruzaba los dedos esperando que Henry no le dijera nada de lo que pasó.

[...]

Cuando Gaby regresó a su cuarto, lo primero que hize fue preguntarle porque subió corriendo al cuarto de su hermano, ella me respondió:

-Lo que sucede es que recordé que mi hermano pasa las tardes de los martes en casa, pero lo recordé tarde, me entretuve mucho ayudando a Sara, Pamela y Dani, y para no perder más tiempo subí corriendo donde él.

Comenzé a pensar que Gaby tenia algo así como una obsesión por su hermano, pero si me pongo a reflexionar, me doy cuenta de que ella tiene miedo, miedo de perder a alguien más.

No se, talvez es sólo mi imaginación.

- Y de que hablaron?_le pregunte con la esperanza se que Henry no le haya contado nada.

-Sólo me preguntó porque me quede hasta tan tarde_ me contestó ella muy tranquila.

La forma con la que contestó Gaby, me demostró que decía la verdad y que Henry no dijo nada.

-Oh, que bueno_ le dije_ te parece si iniciamos la tarea?

-Si, está bien_contestó.

Entre todo eso se me olvidó preguntarle que se quedó haciendo con mis cómplices.

Aún así, yo seguía feliz y sólo pensaba que Henry también empezaba a sentir algo por mi.

Y si, lo mejor que Henry pudo hacer fue no decirle nada de lo que paso a Gaby.

Solo espero que Gaby no se entere de nada hasta un poco mas adelante, porque sino nuestro plan se arruinaría.

Ojalá siga guardando el secreto, y no sea él quien estropeé el plan.