Mi familia siempre busca la manera de hacerme sentir mal.
Siempre logran recordarme que soy una inútil.
Cada día peleo con mi madre, y siempre para dejar algo que yo quiero.
Si les platico de algo que me sucedió en la escuela, solo me ignoran.
Al momento de comer, les cuento un chiste, claro, nadie se ríe y siguen hablando entre ellos.
A pesar de todo eso, trato de hablar con el, le aconsejo y trato de tranquilizarlo; soy su psicóloga personal.
Le ayudo aun teniendo problemas en mi casa.
Me esfuerzo aquí para poder hablarle.
Sin embargo las fuerzas se bajan cuando me dice que se a enamorado otra vez; es ahí cuando le soy consejos de amor, le escribo mientras veo el teclado de mi celular lleno de mis lágrimas.
No siempre le cuento mis problemas, porque me doy cuenta de que no tengo mucho de que quejarme si comparo mi vida pasada con la de el.
Sin importarme todo eso, le sigo escribiendo y le ayudo en lo que puedo.
Pero claro, el solo me ve como su amiga.....
