Prologo

19.3K 953 49
                                    

-papá, ¿tú crees que estamos haciendo lo correcto? - pregunta la joven mirando al hombre de edad que se encuentra a su lado.

-sí, pequeña. Lo mejor que puedes hacer en este momento es apartarte de él. Las cosas han pasado muy rápido y lo único que ha hecho tu esposo es herirte- dice el hombre. Su voz refleja el dolor que siente al ver a su hija así, destruida. Toda la noche había llorado y los ojos de su pequeña así lo habían demostrado.

-pero, yo... lo amo- dice la joven.

-lo sé. Y por ese motivo es mejor un poco de distancia- le dice mientras mira el camino por donde está manejando.

Es un bosque hermoso que se encuentra cerca de la casa de Ray. La única entrada que existe es por ese lugar. Carla, la espora de Ray jamás ha entrado a ese lugar porque odia la naturaleza.

Luego de unos 30 minutos llegan a una casa hermosa, pintada de color verde que se matiza con la naturaleza. Es una cada dónde existía amor, amor clandestino, pero amor verdadero.

-papá, ¿Qué es este lugar? -

-un refugio para mis recuerdos y también un escondite cuando quiero estar lejos de tu madre- le dice.

- ¿cree que estaremos bien? - le pregunta la joven, mientras lleva a le bebé durmiendo en sus brazos.

-sí, lo estarán. Vendré todos los días a verlas y le traeré comida o lo que necesiten. También le dejare el auto, por si necesitas algo- dice el hombre.

-yo no sé conducir- dice la joven apenada.

-no importa. Yo te enseñare. Desde mañana seré tu nuevo profesor- le dice.

-gracias papá. Gracias por todo-

-no hay de que, pequeña-

-lo único que te pido es que no le digas a Cristian donde estoy. No quiero que me encuentre aún. Por favor- el corazón del hombre se arrugo al ver a su hija llorar.

-no te preocupes. No diré nada. Sólo cuídate y cuida a la pequeña- ella asiente con la cabeza. Entran a la casa y un par de horas después Ray se va al pueblo. No quiere que su ausencia llame la atención.

- ¿Por qué? ¿Por qué me tuviste que dañar tanto, Cristian? ¿Por qué me mentiste cuando me decías que me amabas, que confiabas en mí? Pero juro por Dios que no dejare que vuelvas a dañarme, aunque me pidas perdón de rodillas, no te perdonare. Me dañaste demasiado y lo peor es que pueda que lleve un hijo en mi vientre, un hijo tuyo y mío- dice mientras se acurruca con la bebé en la cama.

Con el corazón destrozado sigue viviendo, pero con el gran dolor de seguir amando al hombre que la destruyo. ¿será capaz de perdonarlo?

El Perdón: Miradas de amor, Cristian y Anastasia (2 T)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora