Nuestra historia

¿Y si te digo qué te quiero?

Estabamos esperando, makoto estaba mirando su móvil y yo...yo no paraba de pensar en ese sueño ¿Qué significaba?¿Realemente pensaran eso de mi los chicos y mi subconsciente através de ese sueño me lo mostro? Estaba frustado, más que nunca, ese estúpido sueño solo me traeria un quebradero de cabeza estaba seguro de eso.

-Hey, Sou vamos.-sonrío Makoto

Y...ahí estaba esa sonrisa que me vuelve loco, me levanté y le devolví la sonrisa, entramos y vaya sorpresa todo estaba lleno, nos hicimos un espacio como pudimos y quedamos en una posición un tanto... comprometida y es que estabamos el uno muy cerca del otro, al bajar alguien (muy considerado por su parte) nos empujo haciendo que nos cayeramos quedando yo encima de Makoto y el debajo mio, nuestros rostros estaban muy cerca, demasiado, tenía ganas de besarle, de probar esos labios, pero su voz me saco de mis fantasías.

-¿Sousuke?

-¿Eh?...¡Oh! Perdona...lo siento -me levanté de encima suyo y le ayude a levantarse- ¿Estas bien?

-Sí, tranquilo ¿tú? -Pregunto preocupado

"No, no estoy bien, me duele el pecho porque sé que no me amaras nunca como yo te amo a ti" -pense

-Sí, no es nada, me he llevado golpes peores.

-Sou

-¿Mmm?

-Tengo hambre

-¿Qué? ¿Cómo puedes tener hambre? hemos desayunado hace nada

-Pero...Tengo hambre...

-Esta bien ¿Dónde quieres comer algo?

-Conozco un sitio increible,estoy seguro que te encantara, además, si no recuerdo mal esta cerca de aquí. -me cogío la mano y me guío hasta el restaurante.

Por el camino hablamos de cosas triviales, como el club, los estudios, la familia y lo que hariamos en el futuro. Durante todo el trayecto fuimos cogidos de la mano y cada vez que me intentaba soltar, apretaba más el agarre. Finalmente tras caminar apóximadamente una hora llegamos a una cafetería muy calmada, nada más entrar el olor a café invadio mis fosas nasales, Makoto se acerco conmigo a pedir. Él pidio un chocolate con uno trozo de pasatel de chocolate y fresas y yo un cappuccino y un croissant, luego nos sentamos en una mesa al lado de la ventana.

-¿Qué te parece?

-Es tranquilo y hogareño, me gusta.

- Me alegro, eres al primero al que traigo a-

Su frase quedo inacabada ya que la chica trajo nuestras ordenes.

-Gracias -dijimos a la vez

-Etto...¿tienes novio? -preguntó mirandome

Iba a responderle, pero Makoto se me adelanto.

-Sí y más que novia es novio.

Le dijo mirandola con ¿odio? y ella le regreso la mirada, si la miradas matasen los dos estarían muertos

-Es una pena, que alguien tan guapo sea homosexual, lastima. Pero te aseguro que yo te puedo hacer sentir más placer que él -apunto a Makoto- en la cama.

-Lo siento, pero como ya te ha dic-

No pude terminar la frase porque Makoto me estaba besando, era un beso tierno, su lengua pidio permiso para entrar en mi boca y yo se lo concedí encontrado, al separarnos un hilo de saliva nos unia, la chica simplemente nos miro con cara enfadada y se fue.

-¿Por qué?

-¿Por qué qué?

-¿Por qué me has besado?

-Sencillo, no iba a dejar que esa chica se quedara contigo eso lo tengo claro. Nadie, absolutamente nadie a parte de yo te va a besar.

-Makoto ¿Qué dices?

-Digo q-que...que te amo sousuke, te quiero...¿acepatarias ser mi novio? -estaba sonrojado y nervioso

-¿Q-qué?

-Me gustas, y yo bueno...ah esto olvidalo mejor...-agacho el rostro decepcionado.

Lo tomé por la barbilla, levante su rostros y...lo besé, al principio se sorprendio, pero luego me siguio el beso.

-Tomare esto como un sí, sousuke- me sonrío.

-Te quiero, Makoto.

-Te quiero, Sousuke.- Nos fundimos en otro beso

Estaba feliz, dios, estaba tan feliz que podría explotar de la felicidad, mis sentimientos eran correspondidos y lo mejor de todo es que el fue quien me lo pidio y él me robo mi primer beso.