11.Olvidar a quien amaste.

1.1K 71 6
                                    

-¿Y aunque él te olvidara y odiara? ¿Tú podrías?

-No lo sé.

-Piénsalo. No tienes que darme una respuesta ahora. Solo piénsalo.

***

Habían pasado dos semanas y me había dedicado a esconderme en casa de mis abuelos y no ir al campus. Estaba tumbada en mi cama viendo una película triste cuando mi móvil comenzó a sonar. Miré la pantalla y vi que era Britt. Pensé en no cogerlo pero entonces leí el mensaje debajo de la llamada. "Urgente." Rápidamente cogí la llamada y esperé a que hablase.

-Santana te necesito. Se que no estás bien pero eres mi única ayuda. No se a quién más pedírselo.-realmente Britt parecía apurada.

-Vale. Cálmate, ¿qué ocurre?

DUSTIN'S POV:

Dos semanas antes:

-Te quiero. Y para mi eso no es un error.-grité con lágrimas en los ojos.

Ella siguió corriendo y a pesar de mis enormes ganas de seguirla y rogarla una y otra vez que no lo hiciera me quedé quieto. Estaba destrozado.

-Dala tiempo. Necesita pensar y retirarse del mundo un tiempo. La conozco.-oí la voz de Britt.

Al girarme la vi a ella y Liam abrazados.

-Vamos anda, necesitas distraerte un rato.-Liam me pasó el brazo por los hombros y empezamos a caminar.-Tal vez debas unirte al equipo.

-No creo que valga para eso. A demás, ya me he ganado el odio de varios miembros.

-Bueno, podría intentarlo en las animadoras, te he visto ayudarla y eres bueno. A demás las finales son en tres semanas y ahora que Santana no está necesitamos a alguien más para poder participar.

No se que cruzó por mi cabeza pero acepté y comencé a entrenar con las animadoras.

SANTANA'S POV:

-Laila se rompió la pierna mientras entrenábamos y las finales son en una semana. Sabes que hemos entrenado muy duro para llegar hasta ellas y necesitamos una animadora ya. Y por si fuera poco no animamos nada en los partidos, el público nos ignora. Te necesito. Por favor.

Pensé en decirla que no, que no podía, pero, ¿iba a fallarla? ¿ a mi mejor amiga? No podía.

-De acuerdo.

-Muchísimas gracias. Te veo en media hora en el gimnasio.

No tuve tiempo para contestar ya que me colgó. Peli, cama y casa o instituto y entrenar. Definitivamente prefería la primera opción pero debía escoger la segunda, por ella, por mi mejor amiga. Me quité la manta que me cubría y respiré hondo, después de dos semanas iba a volver. Me di una ducha y me puse una camiseta de tirantes negra y un pantalón de chándal gris, até mi cabello en una coleta alta, cogí mi mochila y me despedí de mis abuelos.

Cuando llegué todas las miradas se fijaron en mi, era normal, llevaba sin ir dos semanas después de mi discursión con él. Caminé por los pasillos evitando el contacto con cualquier persona, no quería preguntas, no quería cotillas. Me paré frente a los grandes portones del gimnasio y tomé aire antes de entrar. Mi mundo se paró en el momento en el que nuestras miradas se cruzaron, él se veía peor que yo pero su mirada tenía aun ese brillo que me encantaba. Rápidamente aparté la vista, no podía mirarle, no debía. Me acerqué a Britt y ella me abrazó.

-¿Qué hace él aquí?-susurré abrazada a ella.

-Después de lo que pasó le sugerí que entrenara para huir de todo. Por favor, no te enfades.

-No me enfado.

Aguanté mis ganas de llorar y miré al equipo separándome de Britt.

-Me habéis fallado. ¿Os ignoran en los partidos? ¿Os creen unos perdedores? Ese no es mi equipo. Vamos a entrenar duro y ganar, porque podemos, porque somos unos ganadores.-Grité.-¡Vamos equipo!

***

El entrenamiento había finalizado, había estado evitando el contacto con Dus a toda costa pero después de que todos se marcharon el se quedó. Me disponía a marcharme pero me agarró del brazo y me hizo girar.

-¿Podemos hablar?-dijo con un tono suave.

-No es un buen momento.

-Es el momento adecuado. Esta vez no te voy a dejar ir. No voy a dejar ir a lo mejor que me ha pasado.

-Soy tóxica.

-Si te refieres a que eres mi puta droga, sí, eres tóxica.

-Lo hago por tu bien.

Me solté de su agarre antes de empezar a llorar a moco tendido y empecé a correr, estaba huyendo de nuevo.

-Lo haces por miedo. Miedo a enamorarte. Pero yo voy a luchar por ti, cueste lo que cueste.-gritó él por último.

Continuará...

Gracias a todos los que siguen ahí a pesar de mi tardanza en actualizar esta historia. Si os ha gustado ya sabéis, votad y comentad. Un beso.

-Gmz.



©Una negada en el amor.Where stories live. Discover now