Prólogo

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-¡Oh! Miren quien viene ahí la lela de Juli- Decía una rubia alta y bronceada que le tenía la peor de las envidias a Julieth, una pequeña chica, pálida como la nieve, con unos pequeños labios rosas, un cabello negro oscuro que enmarcaba su pequeño rostro y unas mejillas que con el mínimo halago se prendían de un color carmín.

-¡Mark!- Grito la castaña que se encontraba a lado de aquella rubia plastica, Mark era el único amigo con el que Julieth contaba, se conocían desde pequeños y siempre fueron amigos. El problema con Mark es que a la hora de defenderla de los insultos se acobardaba, Mark era la estrella del fútbol americano y por lo tanto acompañaba a los que se hacían llamar "populares" aunque Julieth lo veía como un gran tonteria para sus 17 años de edad, aunque no lo decía por la gran timidez y buen corazón que la acompañaban. La rubia se acercaba hacia dónde Mark y Julieth hablaban tranquilamente.

-Hola, Guapo- Dijo la rubia acercándose a Mark y plantando un gran beso en sus labios, ya que por desgracia eran novios. Julieth se limitó a retirar la mirada por la incomodidad de la situación con sus mejillas más que sonrojadas, Julieth era de aquellas personas que no esperaban al príncipe azul o el típico cuento de hadas, ella era como cualquier chica normal, su gran problema era la timidez y la inocencia aunque Mark la quería tal y como era. Ella era apreciada por cualquiera que pasaba más de un minuto con ella, sabrías que ella tendría mucho que ofrecer y brindar así como el buen corazón que cargaba. El silencio se hizo incomodo, Julieth levantó un poco la mirada para percatarse de que Mark ni siquiera le hacía caso, solo se tragaba a su novia, así que Juli simplemente se dio la vuelta y camino con paso tranquilo a la puerta del instituto. Julieth caminaba por los pasillos rápidamente mientras cargaba todos sus libros después de haber pasado por su casilleros, ya que recordaba que su siguiente clase era Historia y esa maestra era la más estricta, pero como cualquier día, Drew pasó a su lado y "disimuladamente" empujo un poco su hombro provocando que todo los libros de Julieth calleran al piso desparramados, todos en aquel pasillo reían sin importar que Juli se había tenido que agachar y levantar uno por uno, ya que no recibió ayuda alguna. Juli regresó con su camino apresurado pero cuando por fin llego al salón la puerta estaba cerrada y eso sólo significaba una cosa: No entraría a esa clase. Sabía que por más que le rogara a la maestra Pérez, no la dejaría pasar, así que con paso resignado y soltando uno que otro suspiro camino hacia su próximo salón para esperar la siguiente hora. Cuando caminaba no puedo creer lo que veía Drew y la barbie se estaban besando lo que ocasionó que la des coordinación de Juli provocará que de nuevo todos los libros se desparramaran, al ver los amantes que los habían atrapado vieron a Julieth con enojo y furia. "La barbie" novia de Mark y peor pesadilla de Julieth llamada Peyton corrió hacia Julieth dispuesta a amenazarla pero Julieth no espero un segundo y dejando todos sus libros tirados se hecho a correr, después de dos minutos de persecuciones Juli ya había sido atrapada debido a su mala condicion.

Una de las cosas que debía arreglar, pensó Julieth.

La barbie no lo pensó y le propinó una cachetada a Julieth mientras la tiraba al piso, esta intentaba pararse y defenderse pero no podía.

-Aww linda ¡cometiste un gran error por estar de entrometida, y nada de esto se lo dirás a Mark! O me vas a conocer, aléjate de Mark- Dice la rubia con una sonrisa de autosuficiencia mientras pateaba el estómago de Julieth que se encontraba en el suelo llorando en silencio, en eso la campana suena dando a entender que era hora de cambiar de clases, con todo el dolor del mundo Julieth subió la mirada para ver cómo la barbie caminaba moviendo las caderas exageradamente y todos salían de sus aulas, se empezó a levantar con paso tranquilo y adolorido mientras algunas personas las veían con burla y otras con pena. Julieth pensó que era suficiente para un día así que todas las horas siguientes entraba antes para evitarse encontrarse con cualquiera, incluso Mark. En la hora de la comida decidió ir a la cafetería por su comida y regresar al aula pero mientras estaba en la fila sintió como alguien la tomaba de la cintura.

-Hola, amiga mía- Dijo Mark propinándole a Juli un beso en la mejilla, provocando que la susodicha se ruborizara y volteara la cabeza.-¿Qué tal tu día? -Pregunto Mark sonriente, en eso una rebelde lagrima salió de Julieth provocando preocupación en Mark- linda ¿Qué pasó?-

Tu novia, tu novia paso, pensó Julieth.

-Nada- Negó Julieth en un susurro mientras con su mano libre limpiaba esa lágrima, que se le había escapado.

-¿Segura?- Pregunto Mark preocupado y Julieth asintió. Cuando Mark estaba apunto de decir algo fue interrumpido por una irritante voz.

-Vaya vaya ¿A quién tenemos aquí..? La lela de Julieth- Dijo Drew con burla hacia "su mejor amigo" Mark. Mark se limitó a ver con tristeza a Juli y pedir disculpas con la mirada. Ella bajo la cabeza y se dio la vuelta hacia las puertas del instituto, ya no tenía ganas de nada, su ánimo estaba por los suelos por lo cual decidió regresar a casa.
Camino por quince minutos hasta llegar a su casa donde vio un carro estacionado para nada normal en ese vencindario frente a la casa del nuevo vecino. Al entrar vio que no había nada fuera de lo normal, su madre trabajaba hasta la noche por lo cual no se daría cuenta de su falta.
Entro a su cuarto y se acostó boca arriba mirando su techo blanco, se sentía cansada, triste y agotada de que su burlaran e incluso la agredieran a tal nivel, así que mientras miraba su techo sintió un pequeño dolor en su pómulo derecho, camino hasta su baño privado y al verse en el espejo no pudo creer lo que veía, ella era débil, muy débil, una gran marca roja enmarcaba su pómulo ¿Cómo es que Mark no se dio cuenta? Se agachó un poco y sintió un jalón en su estómago, se levanto la camisa y noto que había más de un moretón en su abdomen, lágrimas empezaron a adornar su rostro mientras se volvía a mirar en el espejo. Ella era débil, se sentía indefensa, ya no podía más con esto, pero esto se acabaría, ya no habría más tierna y tímida Julieth, desde hoy todo sería diferente, una nueva Julieth estaba por nacer.
Y si era necesario lastimarse a sí misma para evitar que otros la lastimaran, lo haría.
Este sería el nacimiento de Julieth, simplemente Julieth.

Dedicado a: Issy_Magcult

En su juegoWhere stories live. Discover now