Capítulo 6: Bolas a la canaleta, Bolas de bolos y Bolas de Newton.

Start from the beginning
                                    

–Amm... No lo sé. ¿Por qué?

Se encogió de hombros. –Sería bueno tener algo de apoyo, ¿sabes?

Ja, como si le faltara apoyo. Tiene el triple de apoyo que todos los otros jugadores, combinados. –No lo sé...

–¡Incluso podríamos ir a comer después del juego!

¿Era inteligente decirle a Alec sobre la noche de película? Probablemente no, pero lo hice de todas formas. –Tengo planes con Luke todos los viernes.

El rostro de Alec cayó y luego se iluminó de nuevo. –¡Entonces puede venir él también! Y después podemos salir todos juntos; ¿tal vez ir por un pedazo de pizza?

Sonaba tan esperanzado y no quería arruinar su espíritu. Pero al mismo tiempo, no quería aceptar sin preguntarle a Luke primero. Fruncí los labios. –Tal vez, pero tengo que ver si quiere ir.

–De acuerdo, ¿te veo luego?

Sonreí y asentí. Nos dirigimos en caminos separados, yo hacia biología. Era un poco lindo que invitara a Luke, a pesar de que sabía que no lo quería ahí. Realmente estaba haciendo un esfuerzo para que durmiera con él. ¿En serio era tan importante cortejarme para ganar?

La campaña sonó en cuanto crucé el vano de la puerta. Todas las cabezas se giraron hacia mí al entrar. –¡No llegué tarde! –grité, corriendo hacia mi asiento.

La sra. Haggle me envió una mirada desaprobatoria. Sonreí de medio lado, como si pudiera mejorar la situación. –Es la segunda vez en este mes que llegas tarde –susurró Beckett–. ¿Teniendo una sesión íntima durante el tiempo libre? –Me envió una mirada burlona.

Le guiñé. –Lo sabes.

Se fingió herido. –¿Y no me invitaste? Estoy ofendido, Charlotte.

Me encogí de hombros. –Una chica tiene que hacer lo que tiene que hacer.

–Así que, ¿estás lista para estirar ese glúteo mayor(3) en los bolos esta noche?

–No te haga preguntas, Beckett.

Entre más paso tiempo con Beckett, más cómoda me siento con él. Quiero decir, no iba a dormir con él o lo que sea, pero podía vernos como amigos. Solo amigos.

–Ah, negación.

–No solo otro río en Egipto.

Agitó la cabeza tristemente. –Esa es vieja, Charlotte. Creí que eras mejor que eso.

Rodé los ojos sutilmente y abrí mi libro en la página donde se suponía tenía que abrirla hace dos minutos. Odio biología.

Mientras me abría paso entre el tumulto de personas, hice contacto visual con Tyler. Después de un par de segundos, sonrió ladinamente y guiñó. Rápidamente dejé de mirarlo, color ascendiendo a mis mejillas una vez más. Mi corazón dio un salto, pero solo uno. Me apresuré hacia mi casillero, sin atreverme a mirar atrás.

¿Por qué me hacía sentir como con Luke, pero no tan fuerte? ¿Comenzaba a gustarme? ¡No! No podía. Solo estaba comenzando a meterse en mi cabeza, y lo odiaba. Se suponía que era yo quien debía hacerlo sentir así, no al contrario.

Dios, odio a los chicos.

***

–¿Cancelas la noche de película otra vez?

–¡Oye! Tú fuiste el que sugirió que hiciéramos algo diferente –defendí–. Y además iremos a apoyar a nuestro colegio cuando estemos en el juego.

The Last Virgin Standing / Tiffany HuynhWhere stories live. Discover now