43.- Car y Tatsuya se enfrentan

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-No es solo que no pudieran verla. - Laura retoma la palabra, sus ojos viajan de mi rostro al de Car y regresan al mío. - ¿Sabes que ocurre cuando una pareja se aleja por mucho tiempo?

Veo a todos moverse inquietos, claro que se lo que ocurre pero yo aun no he marcado a Scarlett. Los efectos del distanciamiento deben ser mínimos y si sumamos que es humana, pues el único afectado soy yo. Laura niega con una expresión de frustración y se apoya en el costado de Car, al parecer ahora será él quien hable. Me han dicho que suelo agotar a las personas con mi estupidez, yo digo que soy de lento entender.

-Debilidad. Estoy seguro que con el pasar de los días te sientes más y más cansado.- asiento soltando un suspiro de aceptación, en estos momentos no puedo hacer nada más que aceptar mi triste situación.- se que te enojarás por esto pero alguien debía hacerla salir de su cuarto.

-Te dije que no hicieras nada. - se encoje de hombros restándole importancia. La piel de mi frente se siente tensa ¿tal vez estoy frunciendo el entrecejo? Aprieto los puños junto a mi cadera, mis pies descalzos se hunden un poco en el suelo lodoso.

-Intente varios días hasta que me dejó entrar, le explique todo superficialmente... Pero ella quería que tú se lo explicaras todo, por eso la trajimos. - de entre los árboles a sus espaldas se asoma Pitt tomando la mano de mi pelirroja, lleva un paraguas amarillo para protegerse de la incesante lluvia.

Su aroma me llega como una fuerte bofetada, tantos días de no verla realmente me han debilitado. No sentirla cerca cuando es mi mate, debe ser por no tener una unión física. Su rostro se ve más delgado y pálido, también su cuerpo parece temblar y sus ojos fijos en mi tienen una apariencia acuosa.

-La dejaremos contigo para que puedan hablar, termina con esto de una vez. - Laura da media vuelta y se encamina al bosque, la manada la sigue dejando atrás solo a Car y Pitt.

Scarlett no parece asustada por los enormes lobos que acaban de irse, solo me mira extrañamente concentrada. Pitt la ayuda a caminar hasta llegar frente a mí y suelta su mano sobre la mía, el cálido tacto de su piel suave me relaja devolviendo mi respiración a la normalidad.

-Cuando todo esté mejor... Puedes golpearme, se que tienes ganas de eso. Nos vemos. - entre risas Car se interna en el bosque con un alegre Pitt, ambos siguen el camino que eligió Laura al llevarse a la manada.

Regreso mi mirada a la chica que hasta hace poco estaba en mi sueño, definitivamente la de carne y hueso es mucho mejor. Aunque su sonrisa no está en ese hermoso rostro sigue siendo mi pelirroja, mi Scarlett. Cierro los ojos y respiro profundamente, acaricio su mano antes de dar media vuelta y enfrentar a los cuatro chicos.

Nos observan entre curiosos y felices, con un ademán que pretendió ser elegante, señalan el interior de la casona. Scarlett se suelta de mi mano y recorre sola el camino hasta la entrada, Tomo se me acerca y palmea mi espalda.

-Terminaremos el entierro y marcaremos la tumba, así podrás visitarlo luego. Por ahora atiende a tu caperucita.

Sigo a la pelirroja dentro de la casona, mi ropa ahora mojada va dejando un camino de agua tras de mí. Debería cambiarme, con lo debilitado que estoy una gripe no será buena. Sin mirarme se acomoda en el sofá manteniendo su espalda recta y el rostro serio, sus ojos no miran nada en particular pero aun así me siento vigilado por su presencia.

Voy hacia mi cuarto lo más rápido que puedo para no ensuciar más de lo necesario, la ropa mojada la dejo envuelta con una toalla sucia y del bolso saco ropa de repuesto. Siento el cuerpo frío pero no tengo tiempo de entrar en calor, con un trapo seco las gotas de agua que dejé por el camino y el pequeño charco que se formo en la puerta.

Aun si no me escuchas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora