Inside (normily)

In side

Cada noche Emily Kinney se ponía a cantar en el balcón de su apartamento a luz de la lámpara de la calle con la guitarra en la mano. Trataba de ser alegre cuando cantaba pero siempre terminaba siendo melancólica.

Lo extrañaba, se había adentrado en su corazón. Más profundo con cada vez que trataba de olvidarlo porque su mundo era demasiado ocupado: ella actuando y cantando mientras él a tope con sus actuaciones, modelaje o fotografía.

A veces cuando estaba en New York le gustaba ir a una cafetería llamada Brooklyn y beber humeante café, ese café que les gustaba a ambos mientras veían pasar a las personas.

Ella extrañaba horrores sentarse en épocas de nieve ahí con él, mirando los copos blancos cubrir el suelo mientras ellos reían con ligeros tragos de café en cada conversación. Los momentos en que caminaban por la calle sin conversación ociosa, solo ellos dos caminando marcando sus pasos en la nieve.

Emily se limpió el rostro cuando los recuerdos comenzaron a inundarla: los juegos con el maquillaje, él trataba de ponerla sucia y fea como decía mientras sus manos trataban de pintarla pero eran solo un pretexto para tocarla.

También estaban las fotos que se hacían con los actores zombis y sus otros compañeros. Las fotos que tomaron pero jamás subieron a sus cuentas porque aunque inocentes eran muy íntimas, solo de ellos.

Los abrazos, tomarse las manos. Consolarse cuando una escena no salía y la manera en que tenían tanto en común a pesar de la edad. Ese juego de palabras que solo ellos entendían y la tortuga, el pequeño caparazón que a ella le había encantado y que él había robado para ella en una broma pueril.

Emily podía recordar cada detalle, la mano izquierda que le había entregado ese último regalo junto con una declaración —Estas dentro de mí—.

Pero entonces ella había salido de la serie, tenía muchas cosas que hacer y el lazo si bien se mantenía fuerte no era fresco porque no podían estar juntos en el espacio físico.

Emily sonrió con tristeza, ella que había esperado por tanto tiempo a tener un sentimiento siquiera parecido para ahora no poder disfrutarlo. Aún estaba esperando alguna oportunidad pero todo podía pasar: que se olvidara de ella, que encontrara a alguien más y que nunca pasara nada.

Y de nuevo se preparó para cantar pero esta vez en un pequeño auditorio, no solo para ella. Su voz llenaba todo el lugar, quería cantar tan fuerte para que él pudiera escucharla donde quiera que estuviera.

In, In Inside

I find you waiting where i used to hide

In, in, inside

I can't chase you out, though i've tried

Hasta que de pronto, entre el público vio una gorra y cabellos castaños, ojos azules con sonrisa traviesa. Se mantenía casi oculto para todo el mundo menos para ella: como siempre lo había hecho.

Cuando la presentación termino ella salió sin llamar la atención con el hombre siguiéndola de cerca, ambos entraron en la cafetería que les gustaba. Cada uno mirando al otro con una sonrisa enorme.

— ¿Y a qué se debe el honor de ver a Norman aquí? — dijo Emily sin disimular su gozo.

Él sonrió algo apenado -Dentro, muy dentro de mi interior, ahí donde solía ocultar mi sentimientos y protejo mi corazón. Estas ahí, dentro muy dentro de mi aunque he intentado sacarte—.

—Oh, es un viaje para rememorar— Emily jugó su última carta, esa que había dejado pendiente cuando su tiempo en la serie terminó.

—No, tengo trabajo y muchas cosas pero lo quiero intentar. Porque eres todo lo que yo quería y mientras no estabas algo me faltaba — contestó con su voz grave pero en ese tono dulce que tanto le atraía.

Ella estiró su mano y Norman no dudó entrelazarlas con las ella — ¿Café? -.

Es el primer normily hecho en toda mi vida, me da un poco de penita escribir así de los actores por eso es autoconclusivo pero espero de corazón que lo disfruten.