01: Distancia

8K 340 58
                                    

Disclaimer: MARVEL & Disney no me pertenecen.

Notas de la autora: Hechos ocurridos después de Age of Ultron (2015)


Fue la última vez que lo vio, tal vez un par de noches atrás entrenando en la sala, golpeando el saco de arena. Steve estaba sufriendo de insomnio, ya que no despertaba temprano para entrenar en las mañanas, como era de costumbre.

Desde que llegaron a la nueva base de los vengadores, había estado distante, al menos eso se notaba mucho con Romanoff.

La pelirroja lo notaba molesto. Además, ya no sonreía como antes. Tal vez, si ella le preguntase se sinceraría con ella. O tal vez no se atrevería a decirle nada, como lo ha hecho todos estos días que ha estado evitándola.

Extrañaba las misiones que tenían juntos, o cuando ella le mostraba cosas de la actualidad, o incluso, cuando le pedía cómo vestirse bien en 'esta época'.
Debía admitir que extrañaba su compañía.

— Veo que no puedes dormir... —notó que los músculos de su espalda se tensaron al escuchar la voz de Natasha. Se detuvo en golpear el saco de arena y volteó a verla.

— ¿Qué haces aquí tan tarde? —respondió sacándose las vendas de las manos.

— Podría preguntarte lo mismo... —se acercó a él—. Hace días que entrenas en las noches... ¿pasa algo?

Eran alrededor de las tres de la madrugada de un viernes, aunque podría decirse de un sábado. Tony les había dicho que se juntaran en un bar para divertirse un poco. Casi todos fueron, hasta Wanda, que había estado desanimada estos días. La pelirroja pensó que Steve había ido con los demás.

— ¿Desde cuándo te preocupas por mi Romanoff? —secó su rostro con una toalla, mirándola detenidamente. Rogers definitivamente estaba algo cambiado con ella.

— No soy tan fría como crees... —le dijo, mientras él guardaba sus cosas en el bolso de entrenamiento hasta cerrarlo.

— No he podido dormir bien...—dice finalmente. Salieron del cuarto de entrenamiento y comenzaron a caminar por el largo pasillo.

— Lo sé, te he visto más de una vez aquí.

— ¿Me has estado vigilando? —Natasha pudo notar lo ofendido que se sentía.

— Soy una espía, ¿lo recuerdas? —dice con algo de sarcasmo. Steve sonrió moviendo su cabeza de un lado a otro—, sólo quería saber cómo estabas. Últimamente nos hemos alejado y no sé mucho de ti. Supongo que fue la costumbre de estar juntos en las misiones...

Rogers no respondió nada más. A veces, el silencio otorga demasiado. Y Natasha respetaría su decisión.

— bueno...que descanses Steve —giró sobre sus talones para irse a su habitación, cuando sintió el agarre de su compañero por la muñeca

— Tal vez...podríamos hablar un poco —su rostro se había relajado—. ¿Me acompañas a comer algo?


La búsqueda por encontrar a Bucky lo tenía sin dormir. No había podido localizarlo. Incluso con la ayuda de Sam patrullando día y noche, no encontraban su paradero. Steve iba todas las noches o madrugadas a entrenar un poco, hasta sentirse cansado; se da una ducha tibia y a la cama.

Era así hasta hoy, que escuchó la voz de Natasha. Su mente estaba en otro lado, tratando de sacar el estrés que conllevaba buscar a una persona en todo el planeta. Y si, era verdad, se habían alejado mucho este tiempo; sobretodo porque la pelirroja tenía una relación algo extraña con Bruce Banner.

With YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora