Carta 5

64 2 0
                                    

Tigre:

Esperaba verte en la taberna, ya sé que había renunciado porque te molestaba un poco este trabajo pero ahora necesito distraer mi mente.

Ya que si no hago nada, solo pienso en ti.

Además necesito un poco de dinero extra. Los chicos del Chelsea vienen como de constumbre pero tú ya no estas con ellos.

¿Qué pasó con nosotros?

Quizás algún día podré verte de nuevo allí, aún me quedan esperanzas, no puedo olvidar el día en que nos conocimos, fue una casualidad, cosa del destino, justamente en tí me apoye para recibir esa copa.

"Radamel" resonó en mi cabeza, más conocido como el tigre Falcao, ya te conocía, pues soy colombiana al igual que tú, ambos buscabamos algo en Inglaterra, oportunidades. Y desde un principio sabía que no tenía oportunidad, sin embargo salí adelante por ti, siempre fui la otra aunque tú intentaras hacerme sentir como la única.

Suena raro pero te amo mi tigre.

Con amor, Juliana

Juliana:

Mejor conocida como mi princesa, te acuerdas del porque te llamo así, yo si lo recuerdo, fue una semana después de habernos conocido, los chicos iban cada semana a la taberna, ya era una constumbre de ellos, de nuevo otra vez después del show te acercaste a la barra.

Te mire de reojo, me encontré con tus ojos, me regalaste una sonrisa que aún no olvido, me hiciste tan feliz, junto a ti todo era perfecto, tomaste tu bebida, te fuiste pero volviste colocando el vaso desocupado frente a mí, noté que un papel sobresalia dentro, "Tigre" pronunciaron tus labios acompañados de un guiño, tomé el papel algo tembloroso "Visitame cuando puedas, mi tigre" leí en el papel que además contenia tu dirección.

No sabía que hacer. Esa noche no fuí pero te espere la noche siguiente frente a la puerta del edificio donde te vi entrar el primer día, llegaste y no pudiste evitar dejar escapar una sonrisa.

Solamente abriste la puerta y entramos.

Tu apartamento era pequeño pero estaba bien arreglado, pusiste una música suave con la cuál bailamos todo el resto de la noche, ya estabamos cansados a la madrugada, nos sentamos en el sofá y recostaste tu cabeza sobre mi hombro.

"Mi princesa" pronunciaron por primera vez mis labios, "mi tigre" dijiste en respuesta y nos fundimos en un beso que fue nuestro primer beso.

Con amor, Radamel

Por ti mi princesa // FalcaoOnde as histórias ganham vida. Descobre agora