|•SOLO UNA VEZ•| [Snily]{+18}

Uva artificial

Después de estar buscando, Poppy finalmente sacó lo que quería para dárselo a Severe.

—Toma. —extendió el objeto con mango blanco entre sus dedos.

— Una paleta?....Poppy ya no estoy en edad para esas cosas. Deberías mejor guardarla para los chicos de primer—

—Es de uva...-

Era su sabor favorito.

La tomo en silencio.

— Gracias....—

Guardó la paleta en uno de los bolsillos extra que coció a su túnica, acomodo su manga para cubrir el vendaje y salió de la enfermería despidiéndose de Poppy.

Vaya forma de iniciar una mañana.

Con la meta de llegar al gran comedor se dio cuenta que los pasillos ya se empezaban a inundar de gente.

Por los eventos sucedidos le quedaban pocas ganas de estar rodeada de personas y tener que socializar de más.

Quizás hoy vuelva a sus viejas costumbres y pase el día sola dentro de sus posibilidades.

Hace mucho que no lo hace.

Después de empezar a dar tutorías (no solo a los estudiantes que Severe sentía que les debía también a estudiantes que solo tienen dudas han comenzado a ir con ella) ahora tiene una mejor reputación dentro de hogwarts por lo cual más de una persona se detiene en los pasillos a saludarla.

Incluso algunas le sonríen, le hacen conversación y se quieren sentar a su lado en clases o en la biblioteca, algo que le sigue pareciendo una locura.

No dirá que le molesta pero se siente más cómoda al estar en su propio mundo sin tener que preocuparse en saludar a otros para no parecer una maleducada.

Así que optó por desviarse a uno de los pasillos que sabía que estarían menos concurridos, al menos tener unos minutos de paz antes de toparse con el entusiasta de Charles, las ideas chifladas de Panderus y Xenofila Lovegood o a Lirion y sus millones de charlas.

Toda la adrenalina gastada la deja agotada y ni ha comenzado la primera clase, solo quieres tener unos momentos en soledad para no desahogar su mal humor a sus amigos que no tienen la culpa de su estado actual.

La herida le pica pero lo ignora como muchas veces lo ha hecho con el dolor físico.

Por las ventanas de cristal logra ver más lechuzas que vuelan en el aire.

Hay algo en ese aleteo elegante, hacen de hecho sentirse mejor, más ligera como si ella también pudiera convertirse en un pájaro y surcar los cielos.

Cómo una lechuza.

Solo que a diferencia de las lechuzas tienen un destino y ella no, ahora tenía pase libre de ir a cualquier sitio sin ninguna atadura o una misión que cumplir.

Será bueno o será malo dependiendo de la vista de cada quien, se intenta mantener positiva.

Paz.

Tal vez es eso lo que debe hacer su futuro objetivo, Paz...

Se detiene de golpe.

A lo lejos logro escuchar un grupo de estudiantes y reconoce sus voces.

Avery, Rosier y otros más de slytherin.

Para su suerte hay un camino conectado al otro pasillo en el que se puede esconder en lo que pasan ellos.

Una orgullosa armadura de hierro es la que la protege del campo de visión de las demás slytherin mientras pasan a su lado sin saberlo.