A travez del espejo

Liberacion

-¿quién eres?-

pregunto el castaño algo confundido, asustado y desorientado por lo que estaba pasando, jamás había visto su reflejo de esa manera, acaso ¿se trataba de una broma?, era imposible nadie sabía de su estado, todos creían que era el Feliciano de siempre, ese chico alegre y cariñoso. Todos estaban en un error.

-¿me puedes ver?-

esas simples palabras hicieron que el Italiano volviera a su situación actual, en el suelo con su espejo maltratado frente a él con un ser que no conocía, medito la pregunta un poco antes de contestar

-creo que sí, aunque pienso que esto es un sueño-

ambos se miraron, Feliciano tenia la vista fija en esos ojos oscuros, llenos de odio rencor, pero el castaño vio algo más que eso en esos ojos, vio soledad y frustración, no sabía si veía los ojos del contrario o sus propios ojos

-soy real, tan real como tú y tus supuestos amigos

no sabía qué hacer en ese instante. Luciano suspiro levemente, esta era su oportunidad de salir del espejo, de salir de ese lugar y ser libre al fin, encontró un reemplazo y lo aprovecharía, lo usaría al fin saldría de ese maldito lugar.

-¿cómo entraste hay?

Esa pregunta lo dejo totalmente sorprendido, si le decía la verdad había una gran posibilidad de que el otro no le ayudase, tendría que mentirle, aunque siendo Luciano no sería tan difícil hacerlo

-no lo recuerdo fue hace mucho tiempo, lo más importante aquí es que me ayudes a salir, desde que he estado aquí adentro no he comido, extraño el exterior, ¿me ayudaras?

Se podía notar las intenciones del pelirrojo pero Feliciano estaba tan cegado por querer ayudar a alguien, sentirse útil, sentir que al fin tenía un amigo de verdad a alguien que lo quiera

-¿qué tengo que hacer?

La decisión estaba hecha, ya no habría vuelta atrás, ya estaba cansado de todo, de las parejas felices, de su amor no correspondido, de estar solo, fingir ser otra persona, estaba cansado de todo, ahora seguiría sus instintos sin cuestionar nada

- bueno aunque suene algo extraño ... tienes que besarme

no sabía si había escuchado bien, o esto era una muy mala broma del otro, ¿un beso?, un beso que tato de darle a la persona que amaba, un beso que significaba mucho para él, sería su primer beso a alguien más, su primer y más importante beso en la vida. Suspiro levemente y en su rostro se notaba ligeramente sonrojado, trago en seco y se acerco al espejo lentamente. Luciano no podía creerlo, en verdad estaba pasando, se coloco acerco al igual que Feliciano para recibir el beso.

Ambos se acercaban lentamente hasta que los labios rosaron, era extraña la sensación de fio del vidrio, pero poco a poco el castaño empezó a sentir algo tibio en sus labios, carnoso. Luciano poco a poco empezó a profundizar el beso. Una luz algo segadora salió desde el espejo.

El castaño poco a poco abrió sus ojos chocando con el color contrario, avellana contra rojizos algo sangrientos, el rubor de Feliciano se hiso aun más presente al notar que el contrario lo tomaba de la nuca acorralándolo contra la pared, pasa su mano por el torso con una sonrisa bastante siniestra y juguetona

-eres muy lindo lo sabias

El castaño ni una palabra pudo decir ya que el castaño empezó a devorarle la boca, por una parte sabia que esto no estaba bien pero por otra, se sentía tan querido que no opuso resistencia, estaba dejando que el de pelo rojizo tomara las riendas de la situación

-dime cuál es tu nombre

Su respiración se cortaba, es como si le hubiera comido la lengua, no, no sabía si confiar en el, pero ya a recibido mucho daño ¿qué más puede pasar?

-mi nombre es Feliciano

-el mío Luciano

no sabía que era más confuso, el que haya salido del espejo o que le este besando como si nunca hubiese estado con alguien, lo que fuese nunca, nunca dejaría de recordar ese momento

bien hasta aquí les dejo, sé que es algo corto pero con mi lesión en la mano derecha me cuesta escribir, esperen por el siguiente capítulo " encierro y amor" espero que le este gustando